Jean Todt (FIA): «No podemos esperar al coche autónomo para acabar con la siniestralidad vial»
El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo vería «encantado» que se organizara una competición de Fórmula E en alguna ciudad española, un deporte al que considera «un gran escaparate para los vehículos eléctricos»
Aunque su faceta más conocida es la relacionada con las competiciones deportivas, la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) también desarrolla una importante labor en el ámbito de la seguridad vial, de la que es abanderado su presidente, Jean Todt . El también enviado especial de la ONU para la seguridad vial, de paso en Madrid para asistir al Consejo Mundial de la FIA, organizado por el RACE, desgrana algunas de las actuaciones de la organización en la materia.
-¿Qué es más importante para reducir la siniestralidad: buenas infraestructuras, respetar los límites de velocidad o la tecnología que utilizan los coches?
¿En qué país? Hay mucha diferencia entre unos y otros...
-En España, por ejemplo
España ha hecho un excelente trabajo. Creo que todos los factores deben ponerse en conjunto para lograr el éxito. Los conductores deben ser concienciados para poner toda su atención en la carretera, pero también influyen los peatones. En España un 48% de las víctimas son peatones. También motoristas y ciclistas. Cuando hablamos de siniestralidad vial tendemos a centrarnos en los coches pero hay otros factores. Claramente la educación es fundamental, pero también cumplir la ley, el estado de los vehículos, el estado de las carreteras, y la calidad de la asistencia médica en caso de accidente. Personalmente yo estoy a favor de los límites de velocidad en las carreteras, y de que se respeten.
-RACE y la FIA están comprometidas con el objetivo de Naciones Unidas de reducir a la mitad las muertes por accidente de tráfico en 2020. ¿Cómo se puede conseguir una reducción tan drástica en un plazo tan corto de tiempo?
Por desgracia este objetivo es posible que, a nivel global, este objetivo no pueda alcanzarse. Pero puede alcanzarse en los países desarrollados, como España. Las muertes por accidente de tráfico se han reducido en España en los últimos años mucho, cerca de un 68% desde el año 2.000. Eso significa que conocemos la receta. Por desgracia, en muchos países en desarrollo se está produciendo lo contrario. Desde 2010 o 2011 se están incrementando año a año. Por eso en algunos países que no han hecho el suficiente esfuerzo es donde debemos poner el foco.
-El pasado 12 de abril Naciones Unidas puso en funcionamiento un fondo para la seguridad vial. ¿Cuáles serán los destinatarios de esta ayuda?
El fondo es un paso muy importante, en el que he puesto mucho esfuerzo como enviado especial de seguridad vial de la ONU junto con Olga Algayerova, secretaria de la comisión económica para Europa. Hemos creado un comité ejecutivo que se encargará de proponer cómo invertir el dinero para maximizarlo. El dinero provendrá de administraciones y del sector privado, como la fundación de la FIA, Total… La FIA ha creado un panel de alto nivel de seguridad vial. Además, respaldar a los países que necesiten un empuje en seguridad vial tendrá un alto retorno. (La ONU estima que cada 1.500 dólares invertidos permitirán salvar una vida, evitar diez heridos graves y reducir en 51.000 dólares la inversión en seguridad vial en los países receptores).
-¿El coche autónomo supondrá el final de los accidentes de tráfico a medio y largo plazo?
Globalmente, la evolución tecnológica en el mundo de la movilidad es increíble. Lo lleva siendo desde hace cien años. El coche autónomo y conectado será el siguiente paso. Pero antes hay muchos problemas por resolver antes de que llegue a las calles. Es urgente actuar. Debemos hacerlo antes de que llegue el coche autónomo. Además, esta mañana (por ayer miércoles) he estado en la sede de la DGT y he preguntado por la edad media del parque automovilístico. “12 años”, me han dicho ¡Es muy antiguo!. Así que ten en cuenta cuánto podría tardar en llegar el coche autónomo a España. No tenemos tanto tiempo. Tenemos que actuar ahora.
-Sobre los nuevas formas de propulsión, ¿Ve posibilidades de que se dispute un campeonato de Fórmula E en alguna ciudad española?
Creo mucho en el potencial de la Fórmula E como escaparate y estaría encantado de ello, como en Nueva York, en París, en Roma, en Berlín, Hong Kong… Supone un gran escaparate para ayudar a la promoción de los vehículos eléctricos en las grandes ciudades.