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Durante 90 años Skoda ha transportado a los presidentes checos

Hace casi un siglo, Tomáš Garrigue Masaryk, el primer presidente de Checoslovaquia, recibió un Skoda Hispano-Suiza como vehículo oficial. El actual presidente de la República Checa, Miloš Zeman, utiliza un Superb de tercera generación

Madrid Actualizado: Guardar
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Hace 90 años, un Skoda Hispano-Suiza se convirtió en el coche oficial del primer presidente de Checoslovaquia, Tomáš Garrigue Masaryk. Desde entonces, los modelos de la marca han sido los oficiales de numerosos jefes de Estado y gobierno checoslovacos y checos. Miloš Zeman, el actual presidente de la República Checa, ha confiado en la tercera generación Superb.

Tomáš Garrigue Masaryk, que en 1918 se convirtió en el primer presidente de Checoslovaquia, fue también la primera persona en usar un Skoda Hispano-Suiza. Desgraciadamente, aqueel vehículo no se pudo conservar, pero uno similar está siendo meticulosamente restaurado en los talleres del Museo de Skoda.

Limusina

La primera limusina oficial de Skoda fue desarrollada durante una importante época de cambios para el fabricante checo: en 1925, la compañía Lauren & Klement de Mladá Boleslav se unió a un potente socio, la firma de ingeniería Skoda, de Pilsen.

En Bohemia Occidental, las plantas de ésta fabricaron una exclusiva serie de 100 unidades bajo la licencia Hispano-Suiza de los rápidos y técnicamente sofisticados Skoda Hispano-Suiza.

A principios de 1926, el primer vehículo fue vendido al despacho de Tomáš Garrigue Masaryk (1850-1937) por 280.000 coronas checas. El pedido fue efectuado el 25 de julio de 1925, e incluyó varias peticiones del mismo jefe de Estado. Una vez aprobado el diseño personalizado (una limusina con cristal divisorio entre conductor y compartimento de pasajeros) la compañía parisina especialista Carrosserie Kellner Frères fabricó la elegante carrocería. El número de matrícula originario N-1 fue reemplazado por P-118 en los años 30; la P hacía referencia a Praga. Tras la renuncia del presidente, a los 85 años, en diciembre de 1935, el Skoda Hispano-Suiza permaneció en el garaje de su residencia oficial, el Castillo de Praga, hasta el 17 de mayo de 1936. Posteriormente, fue devuelto al fabricante; se desconoce cuál fue su destino a partir de allí.

Aquel modelo contaba con motor de 6 cilindros y 6.654 cc, a partir de un bloque de 350 kg. Su servofreno mecánico único, que pesaba hasta 2,7 toneladas, utilizaba la energía cinética del vehículo para ayudar progresivamente a los frenos de tambor: el efecto era mayor con el incremento de la fuerza del pedal, y la eficiencia de la frenada se podía modular más fácilmente.

Tras la Segunda Guerra Mundial, Skoda volvió a proporcionar un vehículo al presidente de Checoslovaquia: el blindado Skoda Vos (Vládní osobní speciál, o coche especial para el gobierno) era una berlina clásica con una franja cromada frontal. Como versión más larga, con blindaje y cristal antibalas de 52 mm de grosor, pesaba 4.400 kg y medía 5,70 metros de largo, 1,95 metros de alto y 1,75 metros de ancho. Entre 1950 y 1952, cerca de 100 vehículos de esta gama fueron fabricados en diferentes versiones. Dos presidentes checoslovacos, Klement Gottwald (1896-1953) y Antonín Zápotocký (1884-1957), se desplazaban en limusinas así.

Cae el Telón de Acero

En las siguientes décadas, y hasta la caída del Telón de Acero, en 1989, fueron sobre todo los modelos de las marcas soviéticas ZIS y ZIL los que se usaron como coches de estado en el Castillo de Praga. Cuatro años después, tras la formación de la República Checa, Skoda volvió al servicio del Estado. Václav Havel (1936-2011), un activista por los derechos humanos y luego presidente, era un gran aficionado a los coches e insistió personalmente en probar numerosos modelos nuevos de la marca, incluyendo el Felicia y las primeras generaciones Fabia, Octavia y Superb. Su sucesor en el cargo, Vaáclav Klaus, utilizó los Superb I y Superb II durante sus mandatos (2003-2013).

Miloš Zeman, actual presidente de la República Checa, recibió su nuevo coche de estado, un Superb de tercera generación, en el Castillo de Praga el 5 de junio de 2015. La limusina, pintada en Negro Magic con efecto perla y acabado Laurin & Klement, equipa motor turbo de gasolina 2.0 TSI de 280 CV, con transmisión automática DSG.

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