Aniversario
Bugatti, la marca de los récords, celebra su 110 aniversario: «Nada es demasiado caro»
Pese a formar parte del Grupo Volkswagen, el fabricante de Molsheim hace gala de carácter francés en sus modelos, todos ellos un derroche de lujo, potencia y exclusividad.
«Nada es demasiado hermoso, nada es demasiado caro». La frase, atribuida a Ettore Bugatti (1881-1947), bien podría definir la historia de la marca a la que legó su apellido. Procedente de una familia de artistas -su padre era un exitoso diseñador de mobiliario y cerámica Art Nouveau, y su abuelo y hermano, famosos escultores-, Bugatti, milanés de nacimiento, fundó su compañía en 1909 en Molsheim, localidad actualmente en Francia y por entonces perteneciente al Imperio alemán.
Una ubicación idónea para un fabricante que, pese a formar parte del Grupo Volkswagen, hace gala de carácter francés en sus modelos, todos ellos un derroche de lujo, potencia y exclusividad . Así lo prueban sus últimos lanzamientos, todos ellos ya bajo el paraguas de Volkswagen.
El Veyron, fabricado desde 2001, abrió camino, con un motor W16 que le permitió alzarse con el récord Guiness al automóvil más rápido en 2007. También se situaba entre los más caros, con un precio de 1,6 millones de euros. Unas señas de identidad heredadas por su sucesor, el Chiron -homenaje al piloto Luis Chiron-, con 1.500 CV de potencia y una asombrosa velocidad máxima de 496 kilómetros por hora.
Este año, sin embargo, la marca ha ido aún más allá, con la presentación en el Salón del Automóvil de Ginebra del modelo más caro de todos los tiempos: «La Voiture Noire», una edición especial del Bugatti Chiron inspirada en el Type 57 Atlantic de 1936, y adquirida por un coleccionista privado por once millones de euros.
Todos ellos comparten la emblemática parrilla frontal que Bugatti diseñara a principios del siglo XX para sus primeros modelos, incluyendo el primerísimo Type 13 de 1910, el emblemático Type 35, orgulloso poseedor de más de 2.000 victorias en las más diversas carreras o el lujosísimo Type 41, uno de los modelos más grandes y lujosos de la historia. Un elemento muy particular inspirado, por cierto, no en las herraduras de los caballos, como mayoritariamente se cree, sino en los huevos, cuya figura ovalada fascinó tanto a Ettore como a su padre.