La DGT alerta: Cómo debo quitar el hielo del parabrisas

En esta época del año hay que prestar especial atención al parabrisas, debido a las bajas temperaturas y a las complicadas condiciones de visibilidad. El 90% de la información que recibimos al conducir nos llega a través de la vista. Y con el frío y la humedad, lo más habitual en esta época es que por las mañanas nos encontremos con el parabrisas cubierto de hielo. Aunque esto parezca una obviedad, siempre hay que retirar este hielo antes de emprender la marcha . Aunque es habitual encontrarse con conductores que arrancan con él, esperando a que la calefacción y los limpiaparabrisas hagan su efecto, mientras recorren muchos metros contorsionando el cuello y sin apenas ver lo que sucede delante del volante, generando una situación potencialmente peligrosa.

Pero, ¿cómo podemos hacerlo con seguridad y sin dañar el cristal? Nunca utilizar la calefacción del vehículo con una temperatura muy elevada ni eche agua muy caliente sobre un parabrisas helado porque ese cambio brusco de temperatura puede provocar una rotura del parabrisas, según Carglass . De hecho, con una temperatura exterior de -10 grados, usar la calefacción muy fuerte provoca la rotura del cristal a los 5 minutos en más del 80% de las ocasiones. Con -5 grados, sucede en el 70% de las veces. A 0 grados, llega a casi el 60%.

No accionar los limpiaparabrisas sobre esa capa de hielo porque las escobillas se dañan y, en caso de lluvia, dejarán unas marcas sobre el cristal que nos impedirán ver bien. Es más, un truco para no tener que quitar el hielo por la mañana es poner un cartón sobre el cristal por la noche, sujeto con los limpiaparabrisas.

Pero si hay que quitar el hielo, lo mejor es utilizar una rasqueta de plástico, ya que actúa con eficacia y no daña el cristal. Son baratos y se pueden guardar en la guantera. También podemos rociar el parabrisas con alcohol, una sustancia que derrite el hielo con facilidad.

Asimismo, y según la Dirección General de Tráfico (DGT), los expertos recomiendan cambiar las escobillas una vez al año para que estén siempre en perfecto estado si tenemos que utilizar los limpiaparabrisas. Además, es aconsejable que, en invierno, el depósito del limpiaparabrisas no se rellene solo con agua para evitar que se congelen los manguitos y que se obstruyan los pulverizadores.

Por último, subrayar la importancia de cuidar el parabrisas de nuestro coche porque, en invierno, con el frío y el hielo, un pequeño impacto en el cristal puede convertirse en una grieta irreparable o en una rotura definitiva del mismo.