Conducimos el BMW Serie 8 Gran Coupé: palabras mayores
Quien se sentía atraído por el confort de marcha del Serie 7 pero necesitaba un toque «extra» de picante, o busca un coche deportivo pero sin renunciar a las plazas traseras, ahora tiene para elegir. BMW ya comercializa en España el nuevo Serie 8 Gran Coupé , la tercera variante de su modelo deportivo, con carrocería de cuatro puertas, que hemos podido probar en los alrededores de San Sebastián.
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[ Fotogalería: BMW Serie 8 Gran Coupé ]
El Serie 8 Gran Coupé completa una familia avanzada por el impresionante M8 GTE, y posteriormente, por el Serie 8 Coupé y el Serie 8 Cabrio . El remate llegará en 2020 , con las variantes M de las tres versiones.
A diferencia de sus hermanos de gama, el Serie 8 Gran Coupé ofrece la posibilidad de llevar con un gran nivel de confort a dos pasajeros en las plazas traseras. Incluso puede alojarse un tercero, gracias a su configuración 4+1 . Eso sí, únicamente en trayectos cortos, puesto que la tercera plaza trasera, obstaculizada por el túnel central, es más testimonial que práctica. Sus dos acompañantes, por contra, pueden beneficiarse de un espacio para las piernas notable para un coupé deportivo.
Detrás también se puede disfrutar de mandos dedicados para el sistema de climatización -cuatrizona, en opción-, dos tomas USB-C y una base de carga inalámbrica, además de asientos de estética deportiva muy similares a los de las plazas delanteras, igualmente muy confortables y con buen agarre lateral.
Además de las dos puertas extra, las principales diferencias con el resto de la gama vienen dadas por sus dimensiones. Así, el Serie 8 Gran Coupé es 231 milímetros más largo , con una batalla o distancia entre ejes 201 milímetros mayor, lo que se traduce en una respuesta dinámica más afinada y en más espacio para los pasajeros de las plazas traseras. También es más alto (0,61 centímetros más, hasta 1,4 metros) y más ancho (0,3 centímetros, hasta 1,93), con un maletero de 440 litros, suficiente, según BMW, «para alojar tres bolsas de golf completas». Pesea la ganancia en tamaño, tan solo es 70 kilogramos más pesado que el Serie 8 Coupé, gracias al uso intensivo de materiales ligeros como aluminio, magnesio o resina reforzada con fibra de carbono.
Estéticamente, el frontal es idéntico al del Serie 8 Coupé, con una parrilla muy estilizada -que contrasta, por ejemplo, con los enormes riñones del X7, el modelo SUV con el que rivaliza en la cúspide de la oferta de BMW, y que por cierto, se abre y se cierra de manera activa para mejorar la aerodinámica y la eficiencia- y grupos ópticos muy afilados que pueden, como opción, equipar un sistema de iluminación láser con hasta 600 metros de alcance.
A partir del pilar A el Gran Coupé demuestra carácter propio: aunque mantiene la rotura aerodinámica lateral, la inclinación del parabrisas es menor y la línea de techo es más alta con el objetivo de mejorar la habitabilidad. El pilar C se remata, como en todos los BMW desde hace décadas, mediante una curva Hofmeister , que deja paso a una zaga muy musculosa y rotunda, protagonizada por un spoiler integrado en el portón en forma de cola de pato, dos enormes escapes dobles y un marcado difusor trasero.
Está disponible con cuatro variantes mecánicas. La más briosa es la M850i, con un motor V8 de 4,4 litros de 530CV, asociada a la tracción total xDrive, que permite pasar de 0 a 100 kilómetros por hora en solo 3,9 segundos. La siguiente alternativa de gasolina es la 840i de seis cilindros, con tracción trasera o total xDrive -que prima el empuje a través del eje trasero- y 340CV. Ambas pueden ir complementadas con un diferencial trasero autoblocante M Sport -de serie en la opción más potente- para un mayor aplomo a la hora de afrontar carreteras reviradas.
La opción que hemos podido probar, que según estima BMW será la de mayor éxito en España, es la mecánica diésel 840d de seis cilindros, con tracción total xDrive, 320CV de potencia y nada menos que 680 Nm de par. Vinculada, como todas, a una caja automática Steptronic Sport de ocho velocidades con levas tras el volante (y función Launch Control para una aceleración extrema desde parado), demostró un comportamiento muy ágil y una rumorosidad muy baja, apenas percibida en el habitáculo, hasta el punto de que desde el puesto de conducción resulta difícil identificarlo como un propulsor de gasoil.
En marcha, el aplomo del Serie 8 Gran Coupé es notable, así como su comportamiento ágil y preciso, si bien más duro y directo que el Serie 7 . Un modelo que, posiblemente, continuará prefiriendo quién quiera primar la comodidad por encima del dinamismo, por mucho que la calidad de la rodadura del 8 Gran Coupé sea también muy elevada.
Por lo demás, a su comportamiento dinámico contribuye también la suspensión adaptativa M con amortiguadores controlados electrónicamente, así como la dirección activa integral -las ruedas traseras giran de manera independiente-, que facilita tomar las curvas con velocidad y, al mismo tiempo, ayuda a maniobrar a bajas velocidades, reduciendo el radio de giro. La suspensión adaptativa M Professional añade, además, un sistema de estabilización activa para una mejor compensación del balanceo lateral de la carrocería en situaciones de alta exigencia.
El nivel de refinamiento interior es igualmente muy elevado . De serie, el salpicadero y los paneles de las puertas están tapizados en cuero; y se incluyen los asientos deportivos de ajuste eléctrico con reposacabezas integrados, y tapicería de cuero Vernasca (Merino en el M850i). Opcionalmente, están disponibles unos asientos envolventes M Sport. Destaca, asimismo, el techo panorámico, con 1,5 metros cuadrados de superficie acristalada. Los pasajeros traseros pueden además protegerse de la luz solar mediante unas cortinillas automáticas.
El equipamiento incluye además Head up-display de serie y un paquete opcional de sistemas de asistencia que, según BMW, son equivalentes a un nivel 3 de conducción autónoma . Incluye, por ejemplo asistente de dirección y control de carril o control de crucero aptivo con función Stop & Go. Además, incorpora de serie el BMW Live Cockpit Professional, que comprende un conjunto de instrumentación de 12,3 pulgadas (cuadro de instrumentación) y 10,25 pulgadas (infoentretenimiento) que da acceso a navegación en línea y servicios conectados. El sistema admite, además, órdenes emitidas en lenguaje natural, así como la posibilidad de utilizar gestos para algunas funciones, como bajar el volumen.
Los precios parten desde los 101.900 euros para la versión 840i, que se incrementa en 4.000 euros con la tracción total xDrive. La unidad probada 840d xDrive, por su parte, se sitúa en los 109.300 euros, y la más deportiva M850i xDrive alcanza los 137.100.