Mercedes-Benz
Clase B 2019: para viajar como un Rey
Espacioso y perfectamente rematado, destaca en eficiencia con el motor 200d de 150CV, cuyo consumo es asombrosamente bajo
Si hay dos conceptos que no están de moda en el automóvil son los motores diésel y las carrocerías monovolumen. Espacioso, ágil y, como es habitual en la marca de Stuttgart, perfectamente rematado, el Clase B 2019 con motor 200d de 150CV , que hemos conducido durante más de 800 kilómetros, demuestra lo injustas que pueden ser ambas apreciaciones.
La tercera generación del Clase B llegó este febrero a los concesionarios, poco después que la compacta Clase A, su modelo hermano. Con él comparte gran parte de su elevada carga tecnológica, incluyendo el diseño del salpicadero y la instrumentación. La desaparición de la visera y la sustitución del cuadro analógico tradicional por dos pantallas horizontales unificadas amplifican la sensación de espacio interior, que es uno de los principales atributos del modelo. Este diseño dota al habitáculo de un aspecto moderno , reforzado por las luces LED personalizables que recorren la guantera y las puertas.
Sin embargo, no es todo apariencia. También destacan las novedades de fondo del Clase B, que igualmente hereda de la Clase A el sistema multimedia MBUX con reconocimiento de lenguaje natural. Basta con pronunciar las palabras «Hey, Mercedes» antes de un comando para que el vehículo ajuste la climatización o seleccione nuestro próximo destino, con notable eficacia: rara vez habrá que repetir una orden. La experiencia se completa con la botonera táctil en el volante y la pantalla central de infoentretenimiento táctil, de 10,25 pulgadas.
Tras el volante, el cuadro digital puede ser de 7 o 10,25 pulgadas , y su contenido es totalmente personalizable: desde primar la navegación, útil para afrontar entornos desconocidos, a la velocidad, para evitar sobrepasar los límites en carreteras secundarias; o la eficiencia, facilitando lograr un consumo contenido.
Pero la mejor baza del nuevo Clase B se esconde bajo el capó. La oferta mecánica es variada, con propulsores gasolina y diésel de 116 a 190CV. Nuestra unidad estaba impulsada por un propulsor mediano en la paleta, el nuevo 200d de 150CV . Ubicado en posición trasversal, es el primer motor de la gama de Mercedes en cumplir con la normativa de emisiones Euro6 d, que será obligatoria en 2020.
De forma pareja a su limpieza va su eficiencia, realmente notable. El propulsor de dos litros, denominado internamente OM 654q, homologa un consumo de entre 4,2 y 4,5 litros, y no es difícil mantenerse ligeramente por encima de esos umbrales en carretera.
La respuesta es muy buena incluso con cuatro ocupantes y equipaje a bordo, y especialmente afinada con la configuración Sport en el selector de la consola central, que añade un plus de respuesta. Su rumorosidad es baja, gracias también al buen aislamiento acústico del habitáculo. En nuestra unidad se conjugaba con el nuevo cambio de doble embrague y 8 velocidades 8G-DCT , de comportamiento impecable. Tanto que las levas, situadas tras el volante -al que acompañan en su giro- rara vez requieren de la atención del conductor, salvo que se decida por una conducción extraordinariamente deportiva.
Reseñable es también el amplio equipamiento en materia de asistencia a la conducción. El Clase B incorpora asistentes heredados de la refinada Clase S, incluyendo el asistente activo de distancia Distronic o el asistente de parada de emergencia. Incopora también un avisador de cambio involuntario de carril, cuyo funcionamiento no encajará en todos los gustos ya que acciona los frenos para corregir el posible desvío, si bien su nivel de asistencia se puede modular.
Todo ello hace que viajar en el Clase B sea una experiencia realmente cómoda, unido a una suspensión que filtra bien los obstáculos del terreno y a una posición de conducción sobreelevada, en algo menos de 9 centímetros respecto a un SUV. Una buena sensación que solo redondearía con un maletero de mayor tamaño, ya que sus 455 litros lo sitúan no solo por debajo de el de sus principales rivales sino también detrás de la anterior generación, que ofrecía 33 más.