Audi A1 citycarver, urbanita «premium» multiusos
Probamos la versión más «off-road» del pequeño de la familia Audi, impulsado por un gasolina 30 TFSI 116CV y cambio automático S tronic
El pequeño de la casa no tiene mucho de lo que envidiar a sus mayores. Y menos la versión todocamino citycarver , equipada, con algo más de altura, una parrilla específica más agresiva, y protecciones visibles, para los urbanitas sin miedo a adentrarse por trazados algo rotos.
El Audi A1 citycarver es un coche urbano, sí, pero con una altura sobreelevada en cuatro centímetros (35 milímetros por la suspensión y 5 por el mayor tamaño de sus neumáticos), revestimientos de material símil de aluminio y guardas específicas en los pasos de rueda, lo que dotan al conductor de algo más de seguridad a la hora de salir de la carretera. Eso sí, no deja de ser un utilitario (mide 4,05 metros) con tracción delantera y sin un sistema específico de tracción, por lo que conviene no confiarse en exceso y aprovechar sobre todo la ganancia en altura para acceder de forma más cómoda al interior y disfrutar de una posición de dominio sobre el terreno poco habitual en este segmento.
En nuestra unidad, equipada con el nivel S-Line , la deportividad prima en la percepción del habitáculo, especialmente gracias al volante S de cuatro radios y la tapicería con costuras en contraste. Enfocado para un público jóven, lo digital domina, con un cuadro digital de 10,25 pulgadas desde la versión de acceso, mejorada en las subsiguientes con el Audi Digital Cockpit. Y con el paquete MMI Navegación plus, la pantalla de infoentretenimiento crece desde las 8,8 pulgadas hasta las 10,1, convirtiéndose en el centro de control principal del coche aunque, eso sí, no se abandonan los mandos físicos para la climatización. También incluye un sistema de reconocimiento de órdenes vocales, y mapas actualizados en directo por vía telemática.
Nuestra unidad estaba impulsada por la variante de 116CV del propulsor 1.0 TFSI tricilíndrico (30 TFSI) -que también se puede escoger con 95CV- que durante la prueba demostró suficiente equilibrio como para ser considerada de referencia, sobre todo si se quieren realizar recorridos largos con cierta frecuencia (también está disponible el avanzado 1.5 TFSI de 150CV, con desconexión de cilindros).
En nuestro caso, se asociaba a un cambio automático S tronic de siete velocidades, ofreciendo una respuesta bastante ágil aunque un consumo no muy contenido, en el entorno de los siete litros a los cien kilómetros ( homologa 6,1 litros a los 100 ). Los modos de conducción Audi Drive Select permiten afinar sus respuesta, en función de si se busca una conducción equilibrada (Auto), dinámica (dynamic) o eficiente (efficiency). Además, disponible en opción, un sistema de amortiguación adaptativa, asociada al paquete dinámico, que también incluye pinzas de freno en rojo y un actuador de sonido.
En materia de asistencia a la conducción, puede equipar un sistema de aparcamiento que prácticamente estaciona -en conjunto con el cambio automático- de forma autónoma, y control de crucero adaptativo. Los precios del A1 citycarver parten de 24.230 euros , con 27.380 para la unidad probada, y 27.530 para el 35 TFSI de 150CV.
