Las autonomías piden participar en inminente plan de apoyo al automóvil
Reclaman la creación de una Mesa de la Automoción con representación de las comunidades ante su «honda preocupación» por el impacto del coronavirus en el sector
Ofensiva autonómica para participar en el plan de estímulo al automóvil que prepara el Gobierno de Pedro Sánchez . Ocho autonomías con presencia industrial del motor en su territorio han enviado a la ministra de Industria, Reyes Maroto , una misiva en la que le solicitan que cuente con ellas para apuntalar el futuro del sector, muy afectado por la crisis del coronavirus.
La misiva está firmada por los consejeros de Castilla y León, País Vasco, Cataluña, Galicia, Valencia, Aragón, Navarra y Madrid. En ella, manifiestan su «honda preocupación» por la situación del sector, y piden al Ejecutivo que apruebe medidas urgentes para dinamizar la demanda y mantener la actividad y el empleo a corto plazo, además de un proyecto a medio plazo para garantizar que las factorías españolas del sector mantienen su competitividad. Una hoja de ruta en la que las regiones quieren tener « participación activa ».
El domingo, los presidentes autonómicos reclamaron a Sánchez en su reunión telemática la creación de una Mesa de la Automoción , con representación autonómica. Además, plantean nueve propuestas que, a su juicio, deben estar presentes en la estrategia gubernamental de apoyo al sector, y que pasan por establecer un marco de certidumbre sobre el futuro (aclarar la hoja de ruta medioambiental del Ejecutivo, un balón que ya despejó el anteproyecto de Ley de Cambio Climático, que prevé expulsar de los concesionarios los coches térmicos en 2040).
Ayudas no solo para eléctricos
Las autonomías también piden un programa de estímulos a la demanda con neutralidad tecnológica, esto es, ayudas a la compra para todo tipo de coches, no solo eléctricos, sino también diésel o gasolina. Apostar solo por los vehículos «a pilas» en este momento de crisis «puede fomentar los desequilibrios sociales», entienden los firmantes. En este sentido, el sector del automóvil valora muy bien el Plan Renove vasco, que este mes ha duplicado su cuantía hasta los diez millones de euros, y que ofrece subvenciones de 2.500 euros para híbridos enchufables o eléctricos, de 2.000 euros para los de gas, y de 1.000 euros para los diésel o gasolina nuevos; estímulos que se pueden extender además a los vehículos de «kilómetro 0».
Adicionalmente, los firmantes reclaman impulsar la red de recarga para vehículos eléctricos - un estudio de Anfac certificó la semana pasada que España sigue a la cola de Europa en electromovilidad - e impulsar la I+D+i para atraer la producción de baterías y motores eléctricos (, España solo ha logrado atraer entre 2018 y 2019 un 0,56% de las inversiones para la producción de eléctricos en Europa, frente al 66% de Alemania). También apuestan por fomentar la investigación, el desarrollo y la innovación en torno al vehículo autónomo y conectado y para la extensión del 5G a todo el territorio nacional, una tecnología considerada clave de cara a la llegada de vehículos autoconducidos .
Pedro Sánchez prometió, tras el anuncio de cierre de Nissan en Barcelona, un plan de ayudas al sector del automóvil, que según afirmó la ministra de Industria, Reyes Maroto, la semana pasada, se aprobará «en los próximos días». Fuentes del sector consultadas por ABC esperan que su aprobación esté sobre la mesa en el Consejo de Ministros de este mismo martes , o a más tardar, la semana próxima. Según Sánchez, las ayudas al sector se articularán en seis ejes: la renovación del parque de vehículos, el estímulo a la inversión para dar mayor competitividad a la fabricación de la industria española, el impulso a la I+D+i, medidas de fiscalidad, ayuda a la liquidez de las empresa con líneas ICO y también medidas en el ámbito laboral.
Desde el ministerio de Industria se ha abogado por estimular la compra de todo tipo de vehículos, mientras que el Idae, dependiente de Transición Ecológica, tiene preparada ya la segunda edición del Plan Moves, con 65 millones de euros en ayudas para la adquisición de vehículos eléctricos. Su aprobación, prevista para mayo, está a la espera del desbloqueo del plan completo de estímulo al sector. La patronal Anfac ha pedido que la cuantía total ascienda a unos 400 millones de euros.
En el ámbito europeo, Francia anunció a finales de mayo un plan con hasta 8.000 millones de euros para apoyar a la industria gala del automóvil, de los cuales unos 1.000 irían directamente destinados a incentivar la adquisición de vehículos nuevos. En los coches de hasta 45.000 euros, ofrecerá ayudas de hasta 7.000 euros -5.000 para las empresas-; 2.000 euros en el caso de los híbridos enchufables. También incentivará la renovación del parque, con hasta 3.000 euros para quien achatarre su viejo vehículo a cambio de adquirir uno nuevo, diésel o gasolina; 0 hasta 5.000 euros en caso de que el nuevo vehículo sea eléctrico, lo que permitirá a los compradores de vehículos eléctricos hacerse con una ayuda conjunta de hasta 12.000 euros. Mientras, el Ejecutivo galo ha concedido su aval para un crédito de 5.000 millones de euros para Renault.
Por su parte, Alemania también anunció la semana pasada un plan con 2.200 millones de euros para incentivar la compra de automóviles 'cero emisiones' y flotas de vehículos eléctricos, doblando de 3.000 a 6.000 euros el incentivo por vehículo para los compradores de modelos eléctricos (cuantía a la que hay que sumar otros 3.000 puestos por los fabricantes). Los estímulos no se extenderán a los coches diésel o gasolina, pero éstos sí se veran beneficiados por la reducción temporal del IVA del 19% al 16%. El país también destinará 2.500 millones de euros al desarrollo de infraestructuras de recarga para coches eléctricos y a la producción de baterías y 7.000 millones de euros a intensificar el uso del hidrógeno como energía.
De otro lado, Italia baraja aprobar en julio un plan para incentivar el achatarramiento de vehículos antiguos y adquirir nuevos modelos diésel y gasolina Euro6, con ayudas de hasta 4.000 euros por vehículo, dentro de una partida dea 250 millones de euros. El país transalpino ya incentiva la compra de modelos eléctricos y enchufables. Además, el principal fabricante del país, Fiat Chrysler, ha pedido un préstamo con aval estatal por valor de 6.300 millones de euros.