Alemania se niega a extender a los coches térmicos las ayudas de los eléctricos
«No podemos perder más tiempo. Es un elemento vital de nuestra economía. Los proveedores en particular ya están recortando puestos de trabajo a gran escala», reclama el presidente de Baviera
En el orden del día de la videoconferencia que mantuvo la noche del lunes Merkel con representantes del sector alemán del motor había temas estratégicos como la digitalización, el networking y la conducción autónoma, pero se hizo un hueco a la petición del presidente regional de Baviera, Markus Söder, que asistía junto a los presidentes de Baja Sajonia, Baden-Württemberg, y que solicitaba la extensión de las primas a la compra de vehículo a los coches con motores de combustión no contaminantes.
«No podemos perder más tiempo. Es un elemento vital de nuestra economía. Los proveedores en particular ya están recortando puestos de trabajo a gran escala. Por tanto, necesitamos una estrategia de transformación acelerada y debería incluir incentivos de compra para motores de combustión interna clásicos», propuso. Los partidos mayores de la gran coalición, CDU de Merkel y socialdemócratas del SPD, se negaron sin embargo a extender unas ayudas centradas por ahora en los coches eléctricos.
Mejor recepción disfrutó la propuesta del sindicato IG Metall de creación de un fondo de inversión estatal destinado a ayudar a los proveedores medianos de la industria automotriz, para favorecer que las empresas proveedoras superen los cuellos de botella financieros y continuar invirtiendo en la transición a la movilidad eléctrica. La asociación automovilística VDA dejó claro que la crisis de la industria está lejos de terminar. «La situación para muchas empresas sigue siendo tensa», dijo Hildegard Müller, presidenta de VDA.