Entrevista:
José Mercé: «Si no fuera por mi mujer habría dejado de cantar»
El cantaor jerezano abre el festival madrileño InverFest este viernes en el Circo Price, presentando su gran antología «40 años de cante»
Flamenco, madridista, padre y marido, José Mercé tiene todo lo que un hombre tranquilo necesita. Bueno, además tiene muchísimo éxito en el mundo de la música. Y fama mundial. Lleva más años sobre los escenarios que los 40 que titulan su última entrega discográfica, un repaso a una trayectoria admirable, a una historia siempre escrita con buena letra.
-El Circo Price es un sitio estupendo para cantar, ¿no cree?
-Pues sí, un lugar muy emblemático y muy bonito, esperemos que no nos lo quiten, porque tal y como van las cosas dentro de poco no nos quedarán sitios donde cantar (risas).
-¿Preparar una antología abre la puerta a la nostalgia?
A mí nunca me ha gustado eso de celebrar los aniversarios. Esto ha sido como un regalo de Navidad que me ha hecho la compañía de discos, a mí y a mi gente y a mi público. Ha sido bonito porque se incluyen temas que yo llevaba muchísimos años sin escuchar, y sí que entra una sensación como mecla de nostalgia y de sorpresa, porque hay cosas que las escucho y claro, con la perspectiva de los años veo que era muy joven, que a lo mejor podría haber afrontado unos cantes de otra manera... Pero es bonito escucharse. Los 40 años han pasado que ni me he enterado.
-En realidad, falta muy poco para que cumpla 50 años sobre los escenarios.
-Sí, mi primer disco lo hice con 13 años, era un single de 45 revoluciones donde había un garrotín y unos fandangos, y la verdad es que no sé por qué no han cogido ninguna canción de ahí... hubiera estado muy bien.
-¿No participó directamente en la selección?
-No, y me hubiera gustado que hubieran cogido algunos otros temas, pero es que es muy difícil resumir tantos años de cante en 50 canciones.
-Hay un inédito, "Ay que sí, que sí".
Es un villancico que grabé con el maestro Pepe Habichuela, un homenaje al Rastro de Madrid. Cuando hace muchos años no había AVE y no era tan fácil ir y venir a Jerez, nos quedábamos en las Navidades en Madrid y nos juntábamos con los gitanos del Rastro, con los gitanos del terreno como decimos nosotros, a comer, beber y cantar villancicos. Fue una época muy bonita, éramos muy felices.
-En estos cuarenta y pico años, ¿cuál ha sido el momento más difícil a nivel artístico?
-Ha habido algunas temporadas que lo he visto todo muy complicado, que incluso estaba decidido a dejar de cantar. Pero ha sido mi mujer la que me ha sostenido, la que me ha dicho que no, que había que seguir, que había que luchar. Ahora mismo me alegro muchísimo de haberle hecho caso y me siento un privilegiado cada vez que me subo a un escenario.
-Al final la Historia del flamenco la escriben los que tienen éxito, pero... ¿usted ha conocido a muchos cantaores que lo hayan dejado, que se hayan rendido, siendo buenos artistas?
-Si yo te contara. Muchos. Muchos han empezado y luego la responsabilidad les ha podido. Como en casi todo, en el flamenco lo difícil no es llegar sino mantenerse, y algunos no han tenido la fortaleza de seguir luchando, de seguir demostrando su valía día a día.
-Hace poco recibió el premio "Maestro de la Música Mediterránea de la Universidad de Berklee.
-Esa escuela es una maravilla, allí grabé el último disco, en Boston, con Javier Limón. Y la verdad es que aquello es para verlo. Yo me peleaba con Javier, que si eran muchos kilómetros, avión, nosecuántos... pero la experiencia valió muchísimo la pena.
-Premios como este le dan mucha autoridad para opinar sobre la evolución del flamenco. En alguna ocasión se ha quejado de las "fusiones por puro marketing".
-En el mundo de la fusión, el mestizaje, hay mucha confusión. Hay que tener cuidado. Las multinacionales han abusado mucho del flamenco, de la cultura más grande que tenemos en España, con eso del "flamenquito" y otras "infusiones" por el estilo.
-Pero todos los artistas que hacen fusiones dicen que lo hacen "con mucho respeto al flamenco".
-Bueno... es que eso del respeto me parece maravilloso, pero hay que tener cuidado. Insisto. Entiendo que hay muchos grupos con buenas intenciones y todo eso, pero no estoy de acuerdo con lo que hacen. El flamenco es otra historia, tiene su base y su raíz.
-¿Algún nombre, aunque sea off the record?
-No... No me gusta nombrar a nadie, está muy bien lo que hacen, pero si hablamos de flamenco, hay que hablar con mucho respeto y responsabilidad.
-Terminemos con algo más positivo... ¿cómo ve a su Madrid? ¿Qué le pareció el grito de Ronaldo?
-Hemos empezado el año regular, pero espero que se les quite la tontería de las navidades y las fiestas y se pongan el mono de trabajo como Dios manda. Esperamos mucho de ellos. Y lo del grito, pues una cosa simpática. Si te dan tu tercer Balón de Oro... pues imagínate el subidón de adrenalina.