Sole Giménez: «Toda España se pregunta cómo hemos podido cambiar tanto»

Soledad siempre había sido reticente a cantar los grandes éxitos de Presuntos Implicados, la banda que le dio la fama a finales de los ochenta. No quería vivir de las rentas, prefería dar pasos adelante en su carrera y experimentar con nuevas músicas. Pero como dice una de las canciones míticas del grupo, con el paso del tiempo todos cambiamos, sobre todo de opinión. «Ha pasado el tiempo suficiente como para encontrar las fuerzas para volver a interpretar estas canciones, estas viejas amigas. He ido cambiando de idea poco a poco, sobre todo empujada por los fans, que siempre han insistido mucho en que querían volverme a escuchar cantarlas», cuenta Sole tras hacer el último ensayo antes del concierto de hoy.

De hecho, esta cita en el Teatro Fernán Gómez (Pza. Colón, 4 a las 20.30h., 28 euros) será el arranque de la gira de presentación de un nuevo disco titulado «Cómo hemos cambiado», en el que revisita el tema homónimo además de «Alma de Blues», «Cuando quiero el Sol», «Mi pequeño tesoro», «En la oscuridad», «La mujer que mueve el mundo» y otros grandes hits de Presuntos Implicados, un grupo que ha seguido su camino con otra cantante, y con el que Sole ya no mantiene «ninguna relación».

La banda se rompió en 2006 cuando Sole decidió comenzar su carrera en solitario. «Las cosas se quedaron como se quedaron, y no hay que darle más vueltas. En la vida hay que abrir puertas para que se salga gente que no te interesa, y que entre gente que sí. Todos dejamos atrás diferentes situaciones, personas, etc... y hay que saber dejarlo estar».

«Cómo hemos cambiado» es un título que, según Sole, «también viene muy bien para describir la España de hoy en día. Es lo que nos estamos preguntando casi todos: ¿cómo hemos podido cambiar tanto? Porque desde que empezamos Presuntos Implicados, desgraciadamente siento que hemos cambiado a peor, y tenemos un regusto amargo por eso. Hace treinta años estábamos cambiando a mejor, había una ilusión maravillosa, ya no sólo en nosotros, sino en todo el país. Había energía, ganas de hacer cosas, teníamos la claridad de que podíamos hacerlo, cambiar las cosas, cumplir nuestros sueños, y hoy me parece que ha cundido un poco el desánimo, la desilusión. Están empezando a pasar cosas, y habrá que ver si somos capaces de enderezarnos un poco».

En el concierto de esta noche le acompañará uno de los invitados de lujo en su disco, Josemi Carmona, con el que navegará «por las aguas del jazz, la bossa y el swing...», y ella hará gala de la fuerte presencia escénica que siempre la ha caracterizado. Y es que después de treinta años, Sole tiene bien controladas todos esas inseguridades que pueden atenazar a un artista cuando menos se lo espera. «Sí, he visto que Pastora Soler deja la música temporalmente por una crisis de miedo escénico. Lo lamento muchísimo porque es una profesional como la copa de un pino, con una voz extraordinaria y un enorme talento. Espero que pase esta mala racha y lo supere, y también espero que nunca me pase a mí. No me atrevería a darle un consejo, pero si tuviera que dárselo, le diría que intente no exigirse tanto a sí misma. Sé que es difícil, pero hay que recordar que el público también son personas, y todas las personas cometemos errores alguna vez, y no pasa absolutamente nada».