La pintora Anka Moldovan expone en Madrid

Figuras silenciosas, anónimas y llenas de misterio. Así se muestra gran parte de la obra de Anka Moldovan. Nada que ver con esta rumana, repleta de vitalidad y desparpajo. Pero a la hora de pintar, la mujer se transforma en artista, interioriza y nos traslada a sus «No lugares», que así se llama la exposición, para descubrir «silencios, Ofelias y asfaltos», como nos comenta Moldovan.

«He puesto en escena _añade_ reyes locos, personajes que van, que vienen, que se detienen y se articulan bajo una abstracción figurativa». Para la pintora, sus cuadros son así. Para el visitante, es un chorro de luz, de historias humanas y de sensaciones medio ocultas que vale la pena descubrir. Como descubrimos lo cotidiano.

Con cada pincelada, Anka Moldovan ha querido esconder una de esas historias, un relato, experiencias muy íntimas y personales que van más alla de cualquier explicación. Hay que verlo. En su conjunto. «No lugares» es, ante todo, es un lugar común y global.

Nacida en Cluj-Napoca (Rumanía), en 1976, Anka Moldovan es licenciada en Historia del Arte por la Universidad Autónoma de Madrid y ha expuesto en ciudades como Nueva York, París, Berlín, Oporto, Bolzano, Sevilla, Santiado de Compostela y Madrid.

Su exposición estará hasta el 28 de noviembre en el Instituto Cultural Rumano, situado en el número 3 de la plaza de la Lealtad. El horario es de lunes a jueves, de 10 a 20 horas (de lunes a jueves) y de 10 a 17 horas los viernes.