sucesos
Seis detenidos por estafar, desde 2011, a personas de avanzada edad
Se les imputa, desde 2011, más de 120 estafas en España. Solo en el último mes, obtuvieron más de 30.000 euros
La Policía Nacional ha detenido a seis personas y desarticulado una organización dedicada a robar y a estafar por el método de la «siembra». Según la Jefatura Superior de la Policía, sus víctimas eran siempre personas de avanzada edad -algunas de más de 90 años- a las cuales les sustraían el dinero de sus cuentas corrientes tras hacerse, previamente, con sus tarjetas bancarias. Desde el 2011 se les imputa más de 120 estafas llevadas a cabo por todo el país.
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La investigación comenzó al percatarse de la existencia de varias denuncias similares. Las víctimas explicaban que les habían sustraído la tarjeta bancaria al descuido, para posteriormente realizar extracciones fraudulentas de dinero en diferentes cajeros.
Grupo itinerante
Cuando consideraban una zona «quemada» por haber llevado a cabo varios delitos se mudaban a otra ciudad de España para continuar con sus actividades ilícitas. Este carácter itinerante dificultó la localización y detención de los miembros.
Sólo en el último mes, habrían actuado en ciudades como Valencia, Santander, Sevilla o Madrid, llevando a cabo 26 estafas por un montante de más de 30.000 euros.
«La siembra»
El modus operandi empleado se conocía como «la siembra». Uno de los detenidos se encontraba en las inmediaciones de los cajeros automáticos; una vez seleccionada la víctima, se situaba a su espalda observando cómo introducía el número secreto.
Posteriormente, justo antes de que el cajero expulsara la tarjeta, desviaba la atención de la víctima haciéndole ver que se le había caído algo, normalmente dinero, mientras que un segundo miembro del grupo, por el lado contrario, daba el cambiazo a la tarjeta que se encontraba en el cajero por otra de iguales características, dejándola en la boca del lector, de tal manera que la víctima en ese momento no se percataba del engaño.
Una vez con la tarjeta y el número secreto en su poder, los investigados se apresuraban a extraer el máximo posible de efectivo de la cuenta corriente hasta que la misma era cancelada.