Aguirre-Cifuentes: operación deshielo tras la batalla interna por las listas en el PP
Las dos candidatas madrileñas se rodean de las Nuevas Generaciones del partido y apelan a su «inconformismo»
Tras la intensa disputa librada en los últimos días por colocar los propios en las listas electorales del 24 de mayo, Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes, candidatas del PP al Ayuntamiento y a la Comunidad de Madrid, iniciaron ayer un tímido deshielo entre ambas rodeándose del entusiasmo de los jóvenes de Nuevas Generaciones del partido. Pero la exhibición de unidad fue más bien gélida, a la vista del lenguaje gestual que mantuvieron durante el acto conjunto convocado para hacer entrega de cincuenta nuevos carnés de afiliados. Las dos dirigentes madrileñas, que en los días previos reconocieron no estar «plenamente satisfechas» con la candidatura autonómica tras la pugna por guardar los equilibrios internos, no se cruzaron alusiones personales más allá del protocolario saludo inicial. Sólo hubo un ligero apoyo expreso de Cifuentes a Aguirre: «No tengáis duda de que será alcaldesa», le dijo a su joven público.
Tanto Aguirre como a Cifuentes centraron sus discursos apelando al empuje y al «inconformismo» de los que empiezan militancia. A los más jóvenes del partido, reclamaron que se «dejen la piel» y trabajen «pico y pala» para que el PP siga gobernando Madrid. «No nos resignamos, no nos conformamos. A la política solo se puede y se debe venir con el afán de cambiar todo lo que no funciona, de criticar todo lo que no nos gusta, caiga quien caiga», apuntó Aguirre, quien no perdió la ocasión de desmarcarse de la corrupción justo cuando saltaba la noticia de la detención del exministro del PP Rodrigo Rato por presunto fraude y blanqueo de capitales. «Hoy tenemos la persecución de la corrupción en todas las televisiones», dijo. También Cifuentes, que fue implacable: «Nos avergonzamos de los compañeros que se corrompen aprovechándose de las siglas del partido, no del partido», espetó ante su audiencia liderada por la presidenta de NNGG de Madrid, Ana Isabel Pérez, que ocupa el puesto 29 de su lista autonómica.
En el gesto de mayor sintonía que se pudo ver ayer entre las dos líderes, Cifuentes y Aguirre se dejaron retratar enfundadas en la camiseta que les regaló la organización juvenil al término de un «mitin» cuyo maestro de ceremonias fue Pablo Casado. «Son las dos mejores candidatas que ha habido» en Madrid, dijo el portavoz del comité de campaña del PP nacional y uno de los valores en alza en Génova. Casado situó la región como «el mascarón de proa» de las políticas del Ejecutivo de Mariano Rajoy para la «recuperación» económica.
Apuesta por «congreso abierto»
Las dos aspirantes del PP coincidieron en desgranar las razones del «distanciamiento» de los ciudadanos con los políticos. Además de la citada corrupción, Aguirre criticó la falta de democracia interna de los partidos y puso como ejemplo de lo que hay que hacer el último congreso abierto de Nuevas Generaciones de Madrid, en el que Ana Isabel Pérez fue elegida tras una votación de entre tres posibles candidatos. «Fue un congreso como el que yo creo que debe ser. Fue un congreso pionero, A partir de ahora todos los congresos se van a celebrar así... Estoy segura de que va a marcar la pauta la elección de Ana en esto», dijo la presidenta regional, quien se ha posicionado contra los «dedazos» y favorable a que la militancia pueda «expresarse libremente, opine y vote, participe y elija».
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