pozuelo de alarcón
Un hombre con un detector de metales halla un arsenal de armas y explosivos
Estaban enterrados en el Monte del Pilar dentro de unos paquetes, junto a la finca de Los Orioles. Investigan si detrás está algún grupo terrorista
Un hombre que paseaba ayer por el Monte del Pilar (Pozuelo de Alarcón), se topó con todo un arsenal de armas, munición y explosivos. Ocurrió sobre las 11.30 horas cuando caminaba junto a la finca de Los Orioles, según confirmaron a ABC fuentes de la Comandancia de Tres Cantos.
Comunicó los hechos al 112, quien a su vez dio aviso a la Guardia Civil del puesto de Majadahonda. Hasta el lugar acudieron también miembros del Gedex, los Tedax del Instituto Armado, y posteriormente agentes de la Policía Nacional.
Al parecer, quien encontró todo el material estaba usando un detector de metales y estaba escarbando por la zona. Se trata de una práctica habitual en el Monte de Pilar y quien maneja esos aparatos cuentan con autorización y están asociados, precisaron otras fuentes consultadas.
Kalashnikovs, granadas...
El detector comenzó a pitar sin parar. Los paquetes estaban enterrados y envueltos con cinta aislante. Una vez fueron sacados a la superficie, los expertos los abrieron.
Contenían armas de fuego largas (kalashnikovs) y cortas, abundante munición, explosivos, cables, así como aparatos electrónicos, precisó una portavoz de la Benemérita. Además, había varios rotativos luminosos de la Policía Nacional, silenciadores y granadas de mano. Un cargador de uno de los fusiles no funcionaba, precisaron fuentes municipales a ABC.
El lugar fue precintado y ahora la investigación se centra en determinar el estado del material (si fue enterrado hace poco tiempo o no), de quién o quiénes es y qué pretendían hacer con él. Algunas fuentes apuntaron a que podría pertenecer a terroristas yihadistas. Sin embargo, ni Guardia Civil ni Policía Nacional confirmaron nada a este respecto anoche.
El Monte del Pilar es uno de los pulmones verdes de la región, situado a 15 km del centro. Sus 800 hectáreas, pobladas de pinos y encinas, pertenece a familias nobles que lo adquirieron tras la desamortización de 1855.