Vídeo ABC
Las guaridas del supuesto pederasta
Una casa en la calle Santa Virgilia, donde supuestamente llevaba a las niñas, y otra en la calle Montearagón, donde vivía con su madre y sus hermanas. Todo a escasos diez minutos
La casa de la calle Santa Virgilia número 3, en la parte norte del humilde barrio madrileño de Hortaleza, era el centro de operaciones de Antonio Ortiz, donde supuestamente llevaba a las pequeñas para abusar de ellas. Aquí la Policía busca, en presencia del supuesto pederasta desde las 9.20 de este jueves , restos que puedan corroborar todos los hechos de los que se le acusa. El revuelo que ha provocado la presencia de la Policía, del presunto pederasta y de los medios de comunicación atraía a muchos vecinos alrededor del piso. Alguno confesaba a ABC su turbación al saber que lo tenían tan cerca: «Da mucho miedo».
El otro punto desde el que operaba el supuesto pederasta del distrito de Ciudad Lineal era una casa en la calle Montearagón, muy cercana a la calle Arturo Soria y a menos de diez minutos en coche desde el piso franco. Además, ambos lugares están en un radio de acción muy estrecho con respecto a sus delitos. No obstante, este último piso está vigilado las 24 horas del día con cámaras y seguridad privada por lo que no parece probable que pudiera traer aquí a sus víctimas. Esta casa la compartía con sus hermanas y con su madre, a la que califican de una persona «normal» de trato correcto. Eso sí, los vecinos se sienten «perplejos, es absolutamente increíble que estas cosas puedan suceder».
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