La lotera de Dos Hermanas: «La alegría ha sido aún mayor en este año tan duro»
La céntrica administración de la calle San Sebastián reparte 2,40 millones de euros en el municipio nazareno. Los décimos premiados llegan también al barrio de Los Montecillos y a la asociación Reiki Pablo Partido
La suerte no se ha olvidado este año de Dos Hermanas. Sus vecinos han arañado 2,40 millones de euros en la última bola premiada del Sorteo Extraordinario Lotería de Navidad . El número 31.617, un quinto premio que salía a las 13.24 horas, ha dado una doble alegría al municipio nazareno. « La ilusión ha sido aún mayor, porque ya no lo esperábamos. Pero qué alegría. Ha sido aún mayor en este año tan duro ».
Tatiana María Mejías , responsable de la administración agraciada de Dos Hermanas no podía ocultar su euforia tras la mascarilla en la avenida de San Sebastián, también conocida como «la calle Pachico», en pleno centro. «Uff, qué subidón. La verdad es que aún no me lo creo. Es la primera vez que damos un premio de Navidad en las más de tres décadas que llevamos abierto». Su marido e hijo de los anteriores propietarios, Eduardo Cardoso, había tenido que salir a la carrera por una botella de champange para festejarlo como mandan los canónes del 22 de diciembre.
« Yo estaba ya a punto de irme. Porque ya estaba todo el pescado vendido y pensaba aprovechar para hacer unos mandados por el pueblo, pero fue mirar la pantalla, ver el último siete y, prácticamente, empezar a sonar el móvil, llamándome los medios de comunicación para decirme que habíamos dado el último quinto premio del sorteo», explicaba Tatiana, mientras aguardaba, con sus empleadas Alicia y María Ángeles, la llegada del cartel oficial de «Vendido aquí».
Ya sea por la pandemia o bien por la hora de la recogida de niños del cole y de almorzar, pocos son los que acercaron a esta administración. Eso sí, el móvil de Tatiana no dejaba de sonar: «Sí, dime. ¿Tito, eres tú? Nooo, no me digas. ¿Qué llevas un décimo?» La alegría la compartía en seguida con los cámaras y fotógrafos allí presentes. «Es mi tío, que le ha tocado. Como es miembro de la Asociación Reiki de Alcalá de Guadaíra , pues llevaba uno».
Fiesta en Los Montecillos
Y es que de las 34 series del número 31.617 se han vendido en ventanilla, y a la citada asociación Reiki, así como a «la panadería Valme, que está detrás del consultorio de Los Montecillos». Un pellizco de este quinto premio sonría de esta manera a una de las zonas más desfavorecidas de Dos Hermanas.
Allí, a las puertas de la panadería, la fiesta era inmensa. recibían las felicitaciones y el agradecimiento de todo el vecindario. «Les va José y Manuela, responsables del negocio con dos tiendas más en Dos Hermanas, mos a hacer un monumento. Son los mejores. Nos han traído dinero para tapar muchos agujeros», aseguraba David, de 46 años, padre de tres hijos y con cinco nietos, a los que iba a dedicar este premio: «Vamos a pasar estos días mejores y, de paso, habrá Reyeeeees».
Samuel, de 38 años, y con el décimo en mano saltaba de alegría. «Son 6.000 euros, pero nos viene tan bien: para pagar trampas y poder tener un poco de desahogo». Era la recompensa festiva a una mañana de espera e ilusión que no esquivó a Dos Hermanas ni a sus vecinos más humildes.
«Estoy más contenta por lo que se ha repartido, que por lo que haya tocado»
La alegría de este quinto premio también se ha sentido en la Asociación de Reiki Pablo Partido , que trabaja en esta terapia japonesa en tres localidades distintas de Sevilla: Dos Hermanas, Utrera y Morón de la Frontera. Lo hacen de forma gratuita en locales cedidos por ayuntamientos u otras entidades benéficas. Su reslponsabe, Inmaculada Partido, se expresaba así: «Ha sido todo tan emocionante. No tanto por lo que ha tocado a cada socio, sino por lo que se ha repartido».
La asociación, que lleva el nombre del heramno de Inmaculada, que falleció de cáncer, compró más de la mitad de los décimos del quinto premio vendido por la administración de lotería La Estrella de Dos Hermanas. «Llevamos dos años jugando el mismo número... y llevo todo el día saltando y chillando. Estoy en una nube».
Sin embargo, no sólo se han vendido al personal de la asociación, sino que también a través de contactos. Su marido, enfermero y trabajador en la UCI del Hospital de Valme, ha vendido décimos a compañeros suyos. « En un año tan duro para un sanitario, esto ha supuesto una inyección de moral. Ya no es lo que te toca a ti, sino que ves que le ha tocado a tanta gente» , concluye Partido.
