¿Cómo se abre una administración de Lotería?

Queda menos de un mes para que el próximo 22 de diciembre se celebre el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad y hay dos imágenes que -almacenadas en nuestra retina- se nos vienen de forma inevitable a la cabeza. Una es la de los niños de San Ildefonso cogiendo las bolas que escupen los bombos, cantando los números que llevan tatuados y dejándolas insertadas en los alambres que conforman la lira. La otra escena es la de los ganadores de la rifa acudiendo, llenos de alegría, a la administración del Lotería en la que se hicieron con el décimo -o los décimos- premiado y festejando, copa de champán en mano, su victoria.

No son pocos los que han soñado alguna vez con ser el propietario de una de esas administraciones de lotería que tanta suerte reparten y que, un día al año, se convierten en foco de atracción para los medios de comunicación. Sin embargo, lograr este objetivo no es una tarea sencilla : no es lo mismo que abrir otro tipo de comercio -una charcutería, librería o tienda de ropa, por ejemplo-; es más complicado y sensiblemente más caro , ya que se trata de un negocio fuertemente regulado por el Estado, con escasez de licencias y cuya apertura está sometida a criterios muy estrictos. Así que la clave está en armarse de paciencia y estar dispuesto a invertir una determinada suma de dinero.

El primer paso es prestar atención al Boletín Oficial del Estado (BOE) , donde salen publicadas, cada «x» tiempo las concesiones de Loterías y Apuestas del Estado (LAE). Es necesario leer esta publicación atentamente: en ella se explica cuáles son las reglas a seguir para poder participar en la convocatoria, los requisitos que deben cumplir tanto el interesado como el local que va a usar, los documentos que hay que rellenar para presentar solicitud formal. Además, también se tiene que tener en cuenta que la oferta puede ser para tres tipos de establecimientos : integrales —aquellas en las que únicamente se vende Lotería Nacional y juegos autorizados por LAE—, mixtos —donde además se ofrecen, por ejemplo, productos de papelería—, o especiales, como ya explicaba el periodista U. Mezcua en ABC años atrás.

Una vez comprobado que se cumplen todas las exigencias que se piden y se tiene que claro qué tipo de negocio se quiere montar, hay que depositar una fianza de 6.000 euros (que será devuelta cuando acabe el proceso) y presentar la solicitud . Acto seguido, el estado tendrá que comprobar la validez de los datos y documentos ofrecidos, así como revisar si el establecimiento elegido es adecuado. Cuando por fin se recibe el visto bueno, se consigue la licencia: será vitalicia y hereditaria .

Otra opción más rápida pero, por contra, también más cara es adquirir una administración de lotería ya en funcionamiento , ya que desde hace trece años está permitido que los titulares de las administraciones puedan vender su negocio a un tercero. Hasta entonces, transmitir una administración era imposible salvo a los herederos en caso de jubilación o fallecimiento. No obstante, como ya exponía Mezcua «dicha solución no es precisamente barata : la venta de una concesión integral junto con el local completamente equipado oscila entre los 200.000 y los 400.000 euros, mientras que alquilarlo implica desembolsar de 600 a 2.000 euros al mes».