El PP aprueba su impulso social sin el respaldo de la oposición

Apenas ocho grandes consensos de 200 medidas presentadas en el Parlamento gallego , y ninguno en los asuntos que centraron la refriega política, con poco más que temas genéricos como la dinamización de la actividad comercial de los puertos gallegos y la reclamación a Alcoa de que se comprometa a garantizar la continuidad de su actividad en La Coruña .

Ayer concluyó el último Debate del Estado de la Autonomía de la legislatura como había empezado poco más de 48 horas antes , con las espadas en alto y poca voluntad de entendimiento entre los diferentes grupos. Tras la intensa jornada del miércoles en la que los protagonistas fueron los líderes de cada formación, en viernes fue el turno para los viceportavoces, que mantuvieron el tono ácido de las horas anteriores.

Los discursos iban dejando claro en el transcurso de la mañana que los amplios consensos iban a ser las excepción en las propuestas de resolución, hasta el punto de que la viceportavoz popular, Marta Rodríguez Arias, detalló grupo a grupo la voluntad del PP de aceptar propuestas de la oposición o matizarlas para que pudiesen salir adelante en un mayor número. «Debemos dar las gracias al BNG porque fueron los únicos que mostraron intención de, al menos, reunirse con nosotros», afeó a los demás, a sabiendas de que a su partido no le iban a llover apoyos en la votación.

Todas la cuestiones aprobadas por unanimidad lo fueron gracias a que los populares aceptaron medidas procedentes de la oposición. De este modo continuarán su trámite las peticiones de políticas de fomento de la intermodalidad portuaria, así como las demandas en la reforma del voto emigrante para que se avance hacia el sufragio en urna en los consulados llevadas por los socialistas. Entre las restantes, destacan los compromisos de cooperación con las asociaciones de marineros gallegos inmersos en procesos judiciales contra el estado noruego por sus pensiones o la condena pública de la violencia machista con la voluntad de actuar políticamente contra los cargos públicos que realicen declaraciones justifcándola o restándole importancia.

No corrió la misma suerte la hoja de ruta planteada por el PP para la recta final del presente mandato . La intención última de las propuestas es dar cuerpo a la acción de Gobierno que encarará la Xunta en estos próximos doce meses , con un marcado contenido económico y social. Sobre el primer punto, se pone sobre papel la rebaja de impuestos anunciada para 2016, en el que se verá reducido el tramo autonómico del IRPF y se confirmarán las exenciones en Sucesiones y Donaciones «para el 99% de la población», que se completan con otras como la rebaja en las exigencias de capital social para fundar una cooperativa. En materia social, se refrendan los avances sobre el «cheque-bebé» de 100 euros mensuales o los refuerzos para dependencia y las mejoras en los hospitales públicos.