Saltar a Madrid «por el bien de España»

Había muchas negritas ayer en el desayuno informativo de Alberto Núñez Feijóo en Compostela, tantas como nombres de la política, la empresa y la sociedad civil asistieron al acto organizado por Nueva Economía Fórum. Pero una por delante de todas ellas, el exalcalde de La Coruña y exembajador ante la Santa Sede, Francisco Vázquez , presentador del presidente de la Xunta. La sintonía mostrada con Feijóo «desde orillas distintas» del pensamiento fue notoria, sobre todo para diagnosticar el desafío secesionista catalán y llamar a un gran acuerdo de los dos grandes partidos estatales.

«Estamos ante una emergencia nacional en España, por el intento sedicioso contra su unidad , con luces y sin sombras por parte de los nacionalistas», advirtió Vázquez , crítico además con la estrategia del Gobierno y el PP de no responder al desafío, una «estrategia errónea». «Pido un gran pacto PP-PSOE por respeto a la ley , para garantizar la igualdad de los ciudadanos y la defensa de la Constitución», aseveró. «A Paco y a mí nos une lo básico», replicó Feijóo.

Los piropos del viejo socialista al presidente gallego fueron abundantes . «Feijóo no viste el cargo, le da un plus personal, es una persona cuyas opiniones son escuchadas más allá de Galicia y eso la beneficia», para coronar el relatorio de elogios con una invitación en toda regla a que salte a la política nacional. «Algún día habrá que pensar en pasar el puerto de Pedrafita cuando así lo demande el bien de España», aconsejó Vázquez al barón popular, quien con la sutileza acostumbrada subrayó que «estar en el Congreso es un honor para cualquier gallego», si bien «como tenemos un presidente del Gobierno militante del PPdeG, están cubiertas todas las expectativas de Galicia». Ahora que cada uno saque sus conclusiones con qué pasaría con un escenario sin Mariano Rajoy. Feijóo quiso rebajar el tono de Vázquez arguyendo que las suyas no eran sino «palabras reflejo de su amistad».

En la presentación, el exembajador glosó la figura del presidente gallego como «político de urnas y no de opacos tenáculos partidarios» , al tiempo que valoró que «llega donde llega por una brillante trayectoria como gestor público». Precisamente Francisco Vázquez incidió en la importancia de la experiencia , un requisito que entendió exigible para quienes quieren formar parte de la cosa pública.

La anécdota del desayuno la protagonizó el secretario general de Podemos en Galicia , un Breogán Riobóo que se plantó en la mesa presidencial , rodeado de conselleiros, presidentes de diputación y el alcalde de Santiago. Visto está que el rupturismo, ahora en su nueva faceta socialdemócrata, quería atender al presidente de la Xunta.