«operación patos»
La delegada de la Xunta en Vigo niega adjudicaciones a la empresa investigada
María José Bravo, que aparece en el sumario, asegura que Eiriña no obtuvo «un solo contrato» del Consorcio del Casco Vello
El conocimiento paulatino del contenido del sumario de la «operación Patos» , cuyo secreto se levantó para las partes esta misma semana, arroja diariamente nuevos señalados. La lista conocida ya abarca a nombres de la política viguesa de los dos grandes partidos: el alcalde Abel Caballero y varios de sus concejales; el expresidente y exvicepresidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán y José Manuel Figueroa ; la delegada de la Xunta en Vigo, María José Bravo Bosch ; entre otros muchos altos cargos y funcionarios. Todos ellos señalados como supuestos receptores de regalos de las empresas en el epicentro de la trama, Eiriña y Cespa, a cambio de facilitar adjudicaciones a estas sociedades en sus respectivas administraciones públicas. También todos ellos han negado haber recibido dádiva alguna y menos a cambio de favorecer la contratación de obras.
Según se desprende de la investigación policial en base a pinchazos telefónicos, tal y como apuntaba ayer «Faro de Vigo», la constructora Eiriña se habría beneficiado de adjudicaciones públicas mediante «amaños» en connivencia con «personas físicas del sector público». Una de ellas, según recogen los informes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) de La Coruña, habría sido la delegada de la Xunta en Vigo, María José Bravo Bosch , quien ayer se debatía entre la sorpresa y la alerta.
Bravo admitió que se «esperaba» ser señalada públicamente en relación a la operación, pero dijo sentirse «sorprendida» por las conversaciones recogidas en los periódicos y en las que ella es una de las interlocutoras. Rotunda, negó influencia alguna por parte de Alonso Pais, uno de los imputados, sobre su persona, y que el Consorcio del Casco Vello hubiera pagado «un solo euro» a Eiriña.
«Ni un solo euro»
«Tengo la conciencia muy tranquila», dijo, para matizar que «ahora entiendo muchas cosas». Preguntada al respecto de esta última puntualización se limitó a aclarar que «si resulto imputada me defenderé como corresponda, pero me molesta que se ponga el foco sobre mí y también ciertas casualidades», dijo, para añadir que «existen muchas motivaciones».
«Soy la única que no le he dado un solo euro al jefe de Eiriña, los demás sabrán», dejó caer. «Ni siquiera en los negociados de adjudicación directa que podríamos haberle dado el que nos hubiera dado la gana» . Esto con respecto al Casco Vello que ella preside, ya que en el ámbito de la delegación territorial admitió que se le dieron contratos aunque «muy pocos».
Y en su inocencia, como en la de los demás —caso de la conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, que ayer señalaba que «como alto cargo no recibí ningún regalo y menos a cambio de nada»—, se mostró confiado el vicepresidente de la Xunta.
«Sorprendido por todo lo que estamos viendo», Alfonso Rueda reiteró ayer viernes que su partido no juzga a nadie «porque quienes tienen que juzgar son los jueces» . Además, indicó que no conoce el contenido del sumario pero que, en todo caso, «ni vamos a hacer de jueces ni vamos a tomar otras determinaciones que aquello que vayamos conociendo», señaló, para admitir que «si tenemos que actuar, se hará» desde el Ejecutivo autonómico.
«Hay varias personas afectadas y no solo del PP, también del PSOE» , recordó, a la espera de que sea la juez la que haga sus valoraciones. «Poco más tengo que decir», zanjó , para apelar a la presunción de inocencia y a que la Justicia «vaya dando los pasos».
Con cinco imputados hasta el momento , la lista podría llegar a superar la treintena, atendiendo al informe remitido en las últimas horas por la Fiscalía a la juez instructora del caso que investiga presuntas irregularidades en la adjudicación de contratos públicos. Y mientras se destripan los 13.500 folios del sumario, el goteo de nombres y pinchazos telefónicos en los medios de comunicación continúa.
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