Noriega retiró la subvención a Centinelas porque «le sonaba que éramos provida»
La organización, que dejará de cobrar 3.000 euros del Concello, aclara que no tiene ideología sobre el aborto. Desvela que la concejal del área les confesó que no se había leído sus informes y que desconocía su proyecto
La inesperada retirada de las subvenciones municipales con las que contaban las asociaciones Red Madre y Centinelas podría afectar, solo en el caso de la segunda de las plataformas, a más de cien familias del área de Santiago. El dato lo dio a conocer ayer una de las voluntarias de la organización , que quiso aclarar que «no somos un grupo provida» y que en sus estatutos fundacionales no se contempla ideología política o religiosa alguna, tal y como deslizaron desde el concello de Santiago. La vocal aprovechó su intervención ante los medios para matizar «el torbellino de informaciones» desatado por la polémica retirada y desvelar las circunstancias en las que se produjo la anulación de la ayuda.
Según la directiva de Centinelas, la concejal de Política Social del concello las citó para una entrevista en Raxoi advirtiendo que el convenio que mantenían con el ayuntamiento —pactado dos años antes y que vencía en 2016— «pendía de un hilo» . Un día antes de que se produjese el encuentro, la edil Concepción Fernández ofreció una rueda de prensa , explican, en la que anunció que no prorrogaría esta ayuda, con una cuantía por valor de tres mil euros.
«Durante la reunión, la concejal reconoció que no se había leído ni los estatutos ni las memorias de la organización , pero que les habían dicho, que les sonaba, que éramos provida», relató Ana María Robles, presente en la entrevista. Desde Centinelas denuncian que Fernández «no fue capaz de dar un solo argumento para explicar la retirada de la concesión, más allá de que un técnico que trabajó para la Red Madre después trabajó con nosotras». Lo que sí hizo Fernández, relataron, fue asegurarles que «iba a terminar con todas, todas, todas las situaciones de precariedad que haya en la capital gallega».
Sin dinero para pleitos
Por el momento, este grupo formado por una red de más de treinta voluntarios y que da respaldo a un centenar de familias compostelanas descarta iniciar un proceso judicial contra el concello. Reconocen que los motivos de la ruptura del convenio son «puramente ideológicos y antidemócratas» , pero confiesan que no pueden dedicar el poco capital con el que cuentan a pleitear. Los ingresos de la asociación provienen de dos subvenciones concedidas por la Xunta y la Diputación de La Coruña y de las contribuciones de los socios, con las que abonan la nómina de la única persona en plantilla y pagan los alimentos y productos que reparten entre las familias.
Algunas de las beneficiarias de Centinelas asistieron a la rueda de prensa de ayer para dar su testimonio y respaldar a la directiva ante «el miedo a que cierren la asociación y nos quedemos solas» . «Si necesito papillas o pañales vengo aquí y me ayudan. También cuando tengo que solucionar papeles», comentaba una de las madres, divorciada y con tres hijos a su cargo. Hasta el momento, eran los propios servicios sociales los que enviaban a las mujeres en situación de riego a esta asociación ubicada en el barrio de Fontiñas. «Son la única organización de este tipo en toda la ciudad, porque aquí no hay a dónde ir», aseguran algunas de sus usuarias.
«Praxis política chabacana»
Después de describir la gestión de la corporación liderada por Martiño Noriega como una «praxis política chabacana» , la directiva de Centinelas le pidió al alcalde que «estudie algo más sobre la feminización de la pobreza» . Su consejo iba al hilo de las declaraciones que el regidor ofreció la semana pasada, al asegurar que ve «legítimo» que su equipo priorice las ayudas económicas a asociaciones que ejercen actuaciones «más adecuadas a las necesidades sociales» de los compostelanos.
Coincidiendo con la intervención de las damnificadas por la ruptura del convenio con el ayuntamiento, Noriega salió ayer a dar la cara por su concejal y afirmó que «Concepción Fernández sabe de lo que habla» . Sobre la denuncia de Centinelas, evitó hacer declaraciones e instó a «no reabrir el debate». Por su parte, la viceportavoz parlamentaria del PPdeG, Paula Prado, consideró que la corporación municipal «desconoce el trabajo que están haciendo estas entidades» y ligó la decisión de no otorgar las ayudas a la ideología del gobierno de Compostela Aberta.
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