Boimorto acoge una moción de censura contra el alcalde nacionalista del BNG

El alcalde de Boimorto (La Coruña), el nacionalista Xosé Luis Rivas , manifestó ayer que hoy se enfrentará « con serenidad » a la moción de censura planteada por el PP con el apoyo del edil independiente, José Balado, que concurrió a las elecciones en las listas del PSOE, aunque lamentó « la crispación » en el municipio.

Como estaba fijado, de acuerdo con los plazos establecidos legalmente, a mediodía de hoy tendrá lugar la votación de moción de censura contra el equipo de gobierno, conformado por BNG y PSOE , después de que PP y el concejal del Grupo Mixto presentasen el correspondiente escrito en este ayuntamiento coruñés.

Rivas, en declaraciones a Ep, acusó a los promotores de esta moción de provocar « inestabilidad» y «crispación » en el Concello. « No hubo ninguna acción en el gobierno que justifique lo que pasa », sentenció el regidor frentista. Además, argumentó que esta moción supone «traficar alegremente con los votos», en referencia al edil independiente.

Por su parte, la valoración del PP es opuesta. Su portavoz en Galicia, Miguel Tellado , se refirió a a la moción para señalar que los populares aspiran « legítimamente » a la Alcaldía de Boimorto después de que su candidato fuese «el que más votos de los vecinos recibió» para ser alcalde. En este sentido, apuntó que el Partido Popular puede «aspirar legítimamente» a « tener esta alcaldía » e instó a dejar « que hable la democracia » y que «el pleno de Boimorto decida libremente quien quiere que sea el alcalde de ese pueblo».

La sesión, que se prevé concurrida y tumultuosa , contará con la presencia del portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, y de la vicepresidenta de la Diputación deLa Coruña, Goretti Sanmartín . Para Vence, esta operación impulsada por el PPdeG con el apoyo de un concejal no adscrito que concurrió en la candidatura del PSOE constituye «un fraude electoral» que « vulnera la voluntad de los vecinos » de Boimorto. A juicio del líder nacionalista, la censura «contraviene el pacto contra el transfuguismo», al tiempo que supone « una burla premeditada e ilegal ».