El PP asume que el Bloque cederá a colocar un imputado en la Diputación de Lugo

A menos de 24 horas para la constitución del nuevo gobierno de la Diputación de Lugo hay quinielas para todos los gustos. Mientras que el BNG sigue empecinado en no apoyar a un candidato imputado , como lo es Manuel Martínez, alcalde de Becerreá , y las voces socialistas invitan a su secretario general en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro, a no ceder al chantaje de las minorías ; en el PP tienen claro que uno de los dos acabará accediendo a las imposiciones del otro. O el BNG acepta a Martínez, evitando así un nuevo «caso Orozco» -se retiró para evitar que el PP, la lista más votada en las municipales, se quedará con la Alcaldía-, o bien el PSdeG ejecuta el plan B , el de Pablo Rivera, diputado por Láncara y hombre de confianza del líder socialista gallego.

En este sentido, los populares de Lugo tienen pocas dudas de que acabarán por imponerse «los intereses partidistas y el pánico a perder poder», dando como resultado que el BNG acabe apoyando la investidura del regidor de Becerreá como presidente de la Diputación. Este miércoles, coincidiendo con el pleno de investidura, el BNG tiene una buena oportunidad de retratarse demostrando si su código ético «es o no de quita y pon», apuntan desde el PP.

«No es la primera que el BNG fija unas reglas y después se inventa justificaciones para no cumplirlas», sostiene la formación de los conservadores en un comunicado, crítica con que «por encima de su compromiso ético está hacer todo lo posible para que el PP no gobierne».

Dicho esto, y con la presunción de inocencia de Martínez por delante, se preguntan por qué el PSOE insiste en mantenerle como candidato cuando existen «sospechas de comportamientos irregulares de enorme gravedad». Está imputado por malversación de fondos públicos por unas actuaciones en Portomarín.