CUADERNO DE VIAJE

Hasta la derrota final

Besteiro ha mostrado una debilidad extrema. Los demás partidos saben que es un político que cede

luis ojea

El grado de descomposición interna del PSdeG y la falta de liderazgo político de su Secretario General llegan cada día a límites más insospechados. La derrota de González Santín en la votación de Lugo para elegir el candidato a la Presidencia de la Diputación es muy reveladora. Quien pierde es el presunto líder provincial del partido, a quien Besteiro dejó en herencia la organización cuando dio el salto a la Rúa do Pino.

Pero esta es solo la punta del iceberg. Hasta hace semanas, de hecho, Lugo era la única provincia pacificada del socialismo gallego. En Ferrol la guerra civil viene de atrás, pero esta semana se agudizó aún más con un goteo de dimisiones que vuelven a cuestionar a Sestayo. En A Coruña y Santiago la batalla interna ha desangrado desde hace tiempo al partido. Y en Ourense el vodevil de estos años llevó al PSdeG a una posición ya residual en las municipales. El único territorio sin marejada pública a partir de ahora es Pontevedra, dada la influencia creciente de un Abel Caballero que actúa como contrapoder a la dirección gallega y tiene bula hasta para saltarse las normas internas del partido a su gusto.

Cada día es más evidente que el Secretario General del PSdeG carece de autoridad en su partido. Pero aún va a tener menos ahora que se da a la fuga en busca de un sueldo y de un refugio para no enfrentarse a la suicida deriva de su organización. La talla de un político se mide en la capacidad que tiene para enfrentarse a situaciones complejas y gestionar las crisis. Y Besteiro ha demostrado una debilidad extrema. Hasta tal punto se le percibe derrotado que el BNG amaga con exigir la Diputación de La Coruña a cambio de su apoyo a la gobernabilidad de los entes provinciales. Saben que es un político que cede. Ya lo hizo la semana pasada ofreciéndoles al Bloque y las Mareas la cabeza de López Orozco.

A Orozco, por cierto, lo vetaron por sus imputaciones. Y ahora los nacionalistas también se van a tener que retratar, ya que el nuevo candidato a la Diputación también está imputado. ¿Va a darle el BNG sus votos a Manuel Martínez? Es previsible, están en juego muchos cargos en el organismo provincial. Otra cosa será la forma de justificarlo.

Hasta la derrota final

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación