AGE y Bloque intentan evitar la condena del régimen de Venezuela

El régimen bolivariano de Venezuela cuenta en Galicia con dos aliados agrupados en torno al llamado «rupturismo democrático». Su apoyo explícito al régimen de Venezuela se manifestará hoy en el Parlamento autonómico con el intento de boicot de una proposición no de ley del Partido Popular instando al respeto a los derechos humanos en el régimen de Nicolás Maduro. Tanto Alternativa Galega de Esquerda (AGE) como el Bloque Nacionalista Galego presentarán sendas enmiendas para tratar de corregir la posición del Parlamento Europeo y de los grupos mayoritarios de la Cámara. Los discípulos de Xosé Manuel Beiras y los diputados de Xavier Vence tienen claro que Venezuela es un régimen de libertades públicas.

La iniciativa de AGE consta de siete puntos en los que insta a la Xunta a «condenar con firmeza la ultima tentativa de golpe de Estado y los actos de violencia relacionados con el mismo protagonizados por grupos de la oposición de la derecha y de la extrema derecha venezolana».

En el punto número 5 se «censura el rol jugado por algunas corporaciones mediáticas, que manipulan y esconden la verdad y contribuyen a crear un clima de violencia y desestabilización». La propuesta del BNG, defendida por la diputada Montse Prado, contiene dos puntos especialmente llamativos y que se refieren a la «violencia ejercida por la oposición durante los años 2013-2014» y, al igual que AGE, insta al Gobierno de España a no alentar sucesivos «golpes de Estado».

La iniciativa de los rupturistas no sorprende a PPdeG y PSdeG. La propuesta de los populares, como ya avanzó el portavoz Pedro Puy, insta al gobierno venezolano a que cumpla su propia Constitución y respete libertades civiles básicas que en la actualidad entiende que se encuentran conculcadas. El PSdeG votará a favor, como ya hizo en Europa, de la iniciativa del grupo mayoritario. En este sentido, el portavoz, José Luis Méndez Romeu, manifestó a este diario, que «lo único desestabilizador es el gobierno de Venezuela» y las víctimas «son los líderes de la oposición perseguidos y encarcelados por la policía venezolana».

La postura de los nacionalistas gallegos e Izquierda Unida ha sido constante a lo largo de la legislatura. Desde que la represión en Venezuela se agudizó contra la oposición democrática nunca han condenado las acciones represoras y siempre han justificado los castigos del régimen contra manifestantes y disidentes.