Feijóo marca distancias con el bipartito respecto a los viajes oficiales y de partido
El líder de la Xunta aclara que el PP pagó su desplazamiento a Latinoamérica el fin de semana, lo que no sucedía en el pasado
A cada viaje de un presidente de la Xunta al exterior le sigue una polémica. Ha vuelto a suceder con Alberto Núñez Feijóo, que el pasado fin de semana se desplazó a Argentina y Uruguay, pero no como líder del Gobierno autonómico, sino como jefe del Partido Popular de Galicia. Las personalidades no se pueden desdoblar, pero sí las huchas que financian este tipo de visitas. Y a ese respecto, Feijóo marcó ayer distancias con el bipartito al sugerir que él sí tiene claro con qué fondos se paga cada viaje. Los oficiales se costean ahora con dinero público. Los partidistas los sufraga su propia formación. «Ya era hora de que esto ocurriese», declaró preguntado por los medios de comunicación tras la polémica impulsada desde la oposición.
Feijóo salió al paso de las críticas señalando directamente a socialistas y nacionalistas, que compartieron gobierno de 2005 a 2009, un periodo en el que el entonces presidente, Emilio Pérez Touriño, realizó numerosos viajes rodeados también de controversia que él achacó entonces a «historietas que no tienen sentido alguno». El líder de los populares de Galicia resaltó, durante un paseo por el nuevo bosque que rodea a la Ciudad de la Cultura en Santiago, que su viaje relámpago a Buenos Aires y Montevideo los financió el propio PPdeG «y no la Xunta», lo que no ocurría anteriormente, según expuso.
Con esa ruptura con el pasado se volvía a reivindicar como abanderado de un cambio que desde hace meses viene intentando capitanear, en general, en la lucha contra la corrupción y en la promoción de la transparencia en las administraciones. Aún sin citar nombres, aseguró que él cumple «escrupulosamente» con su agenda de presidente regional e intenta compaginarla con sus «obligaciones» en su partido.
Fines diferentes en un mes
De hecho, en las últimas semanas ha cruzado en dos ocasiones el Atlántico con fines distintos, remarcando esa separación de funciones. En febrero, estuvo casi una semana en Colombia, México y Perú en un desplazamiento con intereses comerciales para las empresas gallegas, un modelo que ha venido aplicando desde su primera legislatura con cierta recurrencia.
Menos habituales han sido sus salidas al extranjero para actos de partido. Las ha reservado para acompañar a colegas de otras comunidades como el viernes pasado, cuando se desplazó hasta un semillero de Almería para participar en un acto de campaña de cara a las autonómicas del 22 de marzo de Andalucía. «Estar más de 24 horas en un avión en 48 horas da muestra del respeto por cumplir con mi agenda como presidente de Galicia», intentó zanjar.
Touriño y el 17 de mayo
De los viajes de Touriño —que en la época de Manuel Fraga atacaba a este con similares argumentos a los que ahora recibe— generó especial polvareda el de 2008 a Buenos Aires y a Río de Janeiro por el Día das Letras Galegas. El PP protestó porque en los carteles informativos aparecía el logotipo del PSOE e incluso José Luis Rodríguez Zapatero, «que no sabe ni cuándo es el Día das Letras Galegas ni quién era Xosé María Álvarez Blázquez», el homenajeado en aquel 17 de mayo, criticó Feijóo desde la oposición: «Debería explicar por qué mezcla la Xunta con el PSOE ya que cuando se utilizan fondos públicos con intereses partidistas es lo mínimo que debe hacer». La cita incluyó una visita a una residencia de ancianos en la capital brasileña.
El hoy presidente de la Xunta ve ahora «un poco despistada» a la oposición», que le acusa de dejación de funciones en Galicia: «Me sorprende que ni siquiera acepten que los gallegos emigrantes en el exterior merecen un respeto con independencia de que pertenezcan a uno u otro partido». Y acto seguido, ironizó —como hiciera el lunes el portavoz del PPdeG en O Hórreo, Pedro Puy— con el que hecho de que líderes como el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, «no sea requerido» fuera de Galicia por otros socialistas: «Si no es conocido en ningún lugar, no puedo solucionar ese problema».
Noticias relacionadas