El transporte metropolitano echa a andar con la «autoexclusión» de Vigo
Feijóo lamenta que el alcalde anteponga el «mobiliario urbano» a la demanda de la ciudad

Ausencia sonada la del alcalde de Vigo este miércoles coincidiendo con la firma del plan de transporte metropolitano, y no porque el nombre de Abel Caballero se citara explícitamente, sino porque fue común denominador en los discursos de los intervinientes: en el del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, Ethel Vázquez; y los alcaldes Marcos Besada (BNG) y Javier Bas (PP).
La de ayer distaba de la instantánea que en 2010 protagonizaba aún como regidor el socialista Javier Losada. «Todos los alcaldes tenemos un compromiso firme con la movilidad, para responder a las demandas de nuestros vecinos», aseguraba tras sellar este mismo pacto para la ciudad herculina con Núñez Feijóo. Ese año, el gobierno daba luz verde al proyecto en Santiago de la mano de Xosé Sánchez Bugallo, y dos años más tarde se implantaba en Ferrol, con Vicente Irisarri, y Lugo, con Xosé López Orozco. Todos del PSOE.
Precisamente, sobre esta cuestión incidía ayer Feijóo al agradecer a doce de los catorce ayuntamientos del área —queda pendiente la adhesión de Gondomar— que «antepongan el interés de todos los ciudadanos a cualquier diferencia política», en clara alusión al regidor de Fornelos de Montes, el socialista Emiliano Lage, y al nacionalista de Salceda, Marcos Besada. El resto de los firmantes (Redondela, Cangas, Moaña, O Porriño, Nigrán, Mos, Baiona, Salvaterra de Miño, Soutomaior y Pazos de Borbén) pertenecen al PP.
«Aquí estáis alcaldes que queréis sumar. Servidores públicos que buscáis, antes que ninguna otra cosa, beneficiar a vuestros vecinos, conscientes de que esta apuesta es una oportunidad», señaló en su turno de palabra. « Actuar de otro modo equivale a cerrar los ojos y los oídos a lo que la sociedad reclama , porque ninguna voluntad individual podrá ser más fuerte que la de la gente», prosiguió en alusiones veladas a Caballero, que ha elegido la confrontación como arma electoral.
Fuera del discurso oficial, Feijóo lamentó que haya a quien «le interese más el mobiliario urbano que abaratar el coste de los desplazamientos de los vecinos». «Aquí estamos todos de acuerdo salvo uno. Entiendo que el que se equivoca es el que se autoexcluye», sentenció el mandatario.
De su misma opinión, Bas incidió en que «la confrontación perjudica a los ciudadanos y es un lastre propio de épocas pasadas», mientras que Besada se refirió al plan como el resultado de la «libre colaboración entre todos en busca del bien común».
Por su parte, Abel Caballero continúa sin darse por aludido y este miércoles se retrataba al afirmar que «los vigueses lo tenemos gratis, nos acabamos de ahorrar 260.000 euros».
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