Don Felipe ensalza la muestra de Picasso en su inauguración
La Reina mostró especial interés por los periódicos que el artista confeccionaba en su infancia en los que incluía dibujos
Los Reyes han redescubierto todo un nuevo Picasso, el de su primera etapa de formación en La Coruña , la ciudad donde residió junto a su familia a finales del siglo XIX durante cuatro años. Don Felipe y Doña Letizia viajaron este jueves hasta la capital herculina para inaugurar la exposición «El primer Picasso» en el Museo de Bellas Artes. Con el alcalde, Carlos Negreira, como anfitrión, recorrieron las diferentes plantas que ocupa esta retrospectiva que cuenta con más de 200 piezas, entre ellas las primeras grandes obras del andaluz, cedidas desde los museos del artista en París, Barcelona o Málaga.
«Es una muestra que merece difundirse en toda España», afirmó el Monarca tras la inauguración oficial como evidencia del agrado que le causó, según comentaron los presentes a ABC. La comisaria de la exposición, Malén Gual, fue la encargada de guiar a los Reyes y explicar cada pieza. Permanecieron en su interior cerca de una hora en la que mostraron especial interés por algunas obras. Sucedió, por ejemplo, con la copia que el pequeño Pablo Ruiz Picasso realiza de una lámina del francés Charles Bargue como parte de su aprendizaje en la Escuela de Bellas coruñesa. El original y la reproducción del incipiente genio se encuentran colocadas de manera paralela.
La Reina sacó a relucir su condición de periodista, pues se detuvo para ver en detalle los periódicos «Azul y Blanco» o «La Coruña», que a imitación de otros como «Blanco y Negro» Picasso realizaba con caricaturas o viñetas. El retrato «Don José Ruiz de perfil», que representa al padre del protagonista, «Hombre de la gorra» o una pequeña tabla con un gorrión fueron otras de las piezas en las que más se detuvieron los Reyes durante la apertura de «El primer Picasso», cita a la que asistieron 250 invitados —entre ellos numerosas autoridades— y que desde hoy podrán conocer también todos los ciudadanos hasta el próximo 24 de mayo.
A las ocho de la tarde los Reyes pusieron fin a su visita, la cuarta que realizan a a Galicia juntos desde su proclamación hace menos de un año. También pasaron por el Palacio de María Pita, sede del Ayuntamiento, para firmar en el libro de honor de la ciudad,, donde también dejó su rúbrica el presidente de la República de Portugal, Aníbal Cavaco Silva, que participó junto a su esposa en la XXIII Asamblea General del Eje Atlántico, en al que pronunció su discurso Don Felipe, que combinó castellano, gallego y portugués.
En la principal plaza de La Coruña, los Reyes pudieron estrechar la mano de varios vecinos que acudieron a aclamarlos. También unos dos centenares de coruñeses estuvieron en los alrededores del Museo de Bellas Artes. Fueron mayoría los aplausos, pero algunos como Mercedes y su Manoliño, que esperaron con entusiasmo mientras anochecía junto a unas jóvenes monárquicas, no pudieron saludar a los Reyes.
Lazos con Portugal
Galicia y Portugal afianzaron también en este día sus lazos con los Reyes como testigos. Fue minutos antes de que Picasso acaparara todo el protagonismo. Pasadas las cinco y media de la tarde, entraban en el teatro Rosalía de Castro, donde se entregaron las Medallas de Oro del Eje Atlántico. Allí, Don Felipe recordó que «en la unión está la base del progreso. Solo juntos conseguiremos la fuerza que necesitamos en un mundo globalizado para defender solidariamente y con eficacia nuestras señas de identidad, y para conseguir un futuro de paz y prosperidad para nuestros pueblos». El Rey alabó la «cooperación transfronteriza» como forma de construir Europa y mejorar la vida de quienes habitan en estas zonas limítrofes entre dos países y donde el Eje Atlántico ocupa un lugar destacado.
También intervino en este acto el presidente luso, quien comió con los Reyes en La Coruña acompañado de su mujer después de haberse reunido con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, para firmar en la sede de la RAG un memorando para impulsar el aprendizaje del portugués como lengua extranjera en los colegios de la Comunidad. Cavaco manifestó su alegría por regresar a «esta bella ciudad», en cuya universidad fue investido Doctor Honoris Causa. En su opinión, «dar a los jóvenes instrumentos para conocer mejor a sus vecinos es una prioridad de las sociedad democráticas».
La Coruña, como afirmó Negreira, volvió a ser durante todo el día «ciudad anfitriona por vocación y acogedora por definición». El regidor colocó a Picasso, vinculado para siempre a ella, como «símbolo de la Europa ecléctica» donde «la cooperación es una estrategia para el desarrollo de las fronteras».
Noticias relacionadas