Denuncian que un cómplice de Miñanco con dos juicios pendientes planeó un alijo
La Fundación Gallega contra el Narcotráfico censura la reincidencia entre grandes narcos de la Comunidad
El desmantelamiento de una red que pretendía introducir 1.500 kilos de cocaína en Galicia y su vinculación con uno de los narcos de los años 80 —encargado presuntamente de coordinar el operativo que llevaría la droga hasta tierra— ha reabierto el debate sobre la legislación en materia de tráfico de drogas.
Según el presidente de la Fundación Gallega contra el Narcotráfico, Fernando Alonso, «ejemplos como el de este lanchero de Sito Miñanco que tiene dos juicios pendientes y aún así lideró la operación» ponen de relieve la multirreincidencia en lo que a estos delitos se refiere.
«En estos casos el arrepentimiento de los encarcelados es cero, y ése es un lujo que la sociedad actual no se puede permitir», insiste Alonso tras conocerse la supuesta relación de Rafael Bugallo, más conocido como «el Mulo», con el operativo a bordo del barco «Coral I» en el que también fueron detenidas varias personas del entorno de Miñanco.
Incautación de sus mansiones
Desde uno de los epicentros de la entrada de droga en Galicia, el municipio pontevedrés de Vilagarcía de Arousa, el presidente de la Fundación apela al cumplimiento íntegro de las condenas para los grandes narcos, «gente que no tiene nada que ver con los camellos de a pie y que se aprovecha de los beneficios penitenciarios para introducir toneladas de droga en nuestras calles». Alonso coincide en su planteamiento con la Fiscalía de Galicia, que advirtió en varias ocasiones de la necesidad de disponer órganos judiciales especializados en narcotráfico, alegando precisamente el tipo de actividad de estos grupos, en zonas neurálgicas como Galicia, Andalucía o el Levante español.
Los sectores sociales dedicados a la lucha contra el consumo de drogas en Galicia también solicitan medidas ejemplarizantes como la incautación del patrimonio de los grandes traficantes gallegos, para que la «fortuna proveniente de la droga» revierta en la sociedad. «Asistimos a las redadas que se llevan a cabo en sus domicilios, que suelen ser grandes mansiones con todo tipo de lujos que mantienen pese a entrar en prisión», lamentan.
Ocho detenidos enviados a prisión
Estas reivindicaciones de las que se han hecho eco distintos ámbitos sociales coinciden en el tiempo con la negativa a prestar declaración ante el juez de la bautizada como «banda del Mulo». Los primeros detenidos por el alijo incautado esta semana, entre ellos el propio Mulo, se negaron este jueves a declarar en el Juzgado Número 3 de Cambados. Ocho fueron enviados a prisión. Un noveno fue puesto en libertad con obligación de comparecencias quincenales.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, confirmó este jueves que el arresto de un total de diecinueve personas «de varias nacionalidades, incluida la española» por este alijo. También aclaró que todavía está por determinar el punto exacto en el que atracará el buque que fue capturado en alta mar en su viaje hacia costas gallegas el pasado 6 de enero y que desencadenó la operación.
Noticias relacionadas
- Pasan a disposición judicial parte de los detenidos por el alijo de 1.500 kilos de cocaína de Cambados
- Dieciséis detenidos y 1.500 kilos de cocaína incautados en un nuevo golpe al narcotráfico en Galicia
- Siete detenidos y casi media tonelada de cocaína incautada en una operación antidroga en Galicia