economía
Así se fabrica un empresario en la factoría de emprendedores de Juan Roig
El hotel viVood de Daniel Mayo constituye el primer ejemplo práctico de la «Marina de Empresas» del presidente de Mercadona
Daniel Mayo es un joven segoviano que fue seleccionado con su proyecto viVood por Lanzadera ( la incubadora de empresas impulsada por Juan Roig ) en 2013. «Entonces, yo era un arquitecto que vendía casas desmontables de madera y ahora soy un arquitecto que ha diseñado el primer hotel paisaje de España », recuerda.
El caso de Mayo, que cuenta con veintinueve años en la actualidad, constituye uno de los primeros ejemplos prácticos de la filosofía que pretende implantar Juan Roig en la «Marina de Empresas» , la «fábrica» de empresarios y directivos impulsada por el presidente de Mercadona en Valencia. Primero recibió financiación, asesoramiento y formación en Lanzadera . En su caso, «tras hacer autocrítica y detectar un punto de insatisfacción» con el proyecto inicial, dio un viraje hacia el sector turístico, señalado este jueves por Juan Roig como el de mayor futuro. El propietario de Mercadona, a través de Angels, ha invertido 1,16 millones para apoyar este proyecto innovador : un hotel en la localidad alicantina de Benimantell que pretende ser la punta del iceberg de una red de establecimientos turísticos sostenibles en España.
Mayo explica a ABC que su proyecto fue seleccionado en 2013 entre los 4.200 que llegaron a Lanzadera. «Entonces era un arquitecto que llevaba un año titulado –recuerda– y había preparado el proyecto con un compañero durante la carrera ». Mayo ganó el concurso nacional de investigación científica en el área de arquitectura pero, pese a ello, «no tenía ni un euro y no podía montar mi propia empresa» . Cuando le llamaron desde Lanzadera «estaba en Madrid, con quinientos euros en la cuenta corriente y las maletas preparadas para irme a Australia» . Aquella llamada lo cambió todo. Con sus propias manos montó una casa prefabricada, la subió a un camión y la llevó desde Segovia hasta Valencia . Al verle llegar, los responsables de Lanzadera no tuvieron duda en seleccionarle. Sin embargo, Mayo tenía un sentimiento de «insatisfacción y autocrítica» que le llevó a tomar «la decisión más importante de mi vida». Fue entonces cuando optó por cambiar el destino de su empresa y decidió planificar el hotel viVood , aunque «había un 99,9 por ciento de posibilidades de fracasar». Sus casas prefabricadas habían tenido buena acogida en el mercado turístico. En la edición 2014 de Fitur logró cerrar varios contratos , pero trasladó a los responsables de Lanzadera su cambio de rumbo: «No me iba mal, pero había que tomar decisiones».
De esa forma, en apenas un año –que comenzó a correr en mayo de 2014– logró levantar su hotel de la mano de otros dos arquitectos ( Agustín Mari y Pablo Vázquez ). Fue el promer proyecto turístico en el que ha participado Angels Capital, la sociedad inversora de Juan Roig, que destinó 1,16 millones. El 25 de junio, este hotel de veinticinco habitaciones abrió sus puertas. No es un hotel cualquiera –sostiene–, sino el «hotel que el cliente necesita» : con las «vistas y los olores de la naturaleza pero sin renunciar a las comodidades». Mayo ha alumbrado un establecimiento en el que «el lujo está en la evasión» y la habitación se paga a 170 euros de media la noche. Este verano ha logrado una ocupación del 80% gracias a un «modelo de calidad total inspirado en el de Mercadona, donde prima el sentido común, cumplir las leyes y satisfacer al cliente». El hotel viVood ( www.vivood.com ) ya cuenta con dieciocho empleados, en apenas dos meses ha facturado 150.000 euros y aspira a «crear una red de alojamientos turísticos de calidad» en toda España. El primero de los productos de la «fábrica» de Juan Roig sigue con su sueño: «No me voy a quedar en un hotel de 25 habitaciones» .