tribunales
José Luis Olivas, de la cima política y financiera al calabozo
El expresidente de la Generalitat y de Bancaja declara este miércoles en la Audiencia Nacional tras ser detenido por corrupción
De la cima de la política y las finanzas al calabozo. José Luis Olivas ha pasado a engrosar la lista de dirigentes españoles que han acabado detenidos en operaciones relacionadas con casos de corrupción. Este lunes, el que fuera presidente de la Generalitat y de Bancaja fue detenido en Valencia por la Guardia Civil en una operación dirigida desde la Audiencia Nacional. Está imputado por los presuntos delitos de apropiación indebida, blanqueo, administración desleal, corrupción y falsedad documental derivados de un crédito para realizar operaciones urbanísticas en el Caribe que, de acuerdo con un informe del Banco de España, habría generado un quebranto económico para Bancaja y el Banco de Valencia de 223 millones de euros.
Olivas pasó la noche en los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil , donde prestó declaración durante la jornada de ayer junto a otros cuatro detenidos en la operación, todos ellos exdirectivos de las entidades financieras que presidió.
Todos ellos serán trasladados este miércoles a Madrid , donde el juez de la Audiencia Nacional Juan Pablo González , encargado de instruir la causa, les interrogará.
Esta investigación, que permanece bajo secreto de sumario, se inició en 2014 después de una denuncia presentada por Bankia Habitat tras la intervención por el Banco de España del Banco de Valencia.
Según la denuncia que la originó, había irregularidades en la concesión de varios préstamos al Grupo Gran Coral para la inversión inmobiliaria en el Caribe mexicano, eludiendo los procedimientos de control interno de las entidades financieras.
Causas pendientes
La detención de Olivas supuso el colofón a un largo periplo judicial derivado de su gestión al frente de entidades financieras. De hecho, el FROB ha presentado hasta ocho querellas contra los exdirectivos del Banco de Valencia por operaciones ( la mayoría inmobiliarias ) ejecutadas por la entidad antes de su nacionalización. De acuerdo con las citadas denuncias, la antigua cúpula de la entidad habría generado un quebranto económico de 630 millones. La última ocasión en la que Olivas pisó un juzgado fue el pasado 22 de abril, cuando declaró en calidad de imputado ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz por el presunto desvío de fondos del Banco de Valencia a sociedades del empresario Ramón Salvador, con el que pudo ocasionar un perjuicio de 120 millones.
Olivas está imputado en el caso Bankia y será juzgado en otro procedimiento por supuesto delito fiscal y falsedad con el empresario Vicente Cotino.
En plena detención, ayer se conoció que Anticorrupción ha pedido el archivo de una de las piezas abiertas en la Audiencia Nacional por créditos irregulares contra los responsables del Banco de Valencia.
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