COMUNIDAD VALENCIANA
El temporal desborda embalses que estaban secos hace una semana
Algunos puntos de la Comunidad Valenciana han acumulado más de 600 litros por metro cuadrado en una semana
El temporal de lluvias que azota desde la pasada semana la Comunidad Valenciana ( especialmente en las provincias de Valencia y Castellón ) ha supuesto el primer alivio para los pantanos de la región en el último año. De hecho, la reserva hídrica ha aumentado en siete días cerca de treinta hectómetros cúbicos hasta alcanzar los 890, lo que supone algo más del 36,4 por ciento de su capacidad.
Con todo, tras un año marcado por la peor sequía del último siglo , las reservas todavía son 237 hectómetros inferiores a las de hace doce meses, de acuerdo con los datos facilitados ayer por el Ministerio de Agricultura.
La Comunidad Valenciana acumula seis días bajo los efectos de una borrasca que ha dejado más de seiscientos litros por metro cuadrado en algunas localidades y que ha propiciado que embalses que antes estaban secos, como el de María Cristiana en la provincia de Castellón, se hayan desbordado.
La máxima de España
Según el informe remitido por el Ministerio de Agricultura, la máxima precipicitación acumulada en España durante la pasada semana se registró en Castellón, con 175,6 litros por metro cuadrado .
El río Bergantes, cuyo aumento de caudal obligó a desembalsar agua en el pantano de Calanda (Teruel) y que la noche del lunes registró una punta de crecida por las lluvias en los márgenes del Ebro, alcanzó ayer los 500 metros cúbicos por segundo a las ocho de la mañana a su paso por la localidad castellonense de Zorita. La borrasca, que en el agunos puntos de la región ha dejado las precipitaciones más importantes desde 1912 en un mes de marzo, todavía no compensa los efectos del ciclo seco, que ha provocado unas pérdidas superiores a los cuatrocientos millones de euros.
De hecho, los embalses valencianos apenas acumulan el 36,4 por ciento de su capacidad y se hallan todavía muy lejos de los 1.011 hectómetros de media de la última década. Además, el incremento de las reservas se ha producido de forma irregular. En Castellón, la provincia que más ha sufrido los efectos de las lluvias, han aumentado dieciocho hectómetros cúbicos y han dejado los pantanos al 45 por ciento. Mientras, en Valencia la reserva sube nueve hectómetros hasta el 31,3%. En Alicante, la provincia más castigada por la sequía, la reserva hídrica apenas ha aumentado en dos hectómetros cúbicos.
El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Serafín Castellano, advirtió ayer de que, como consecuencia de las grandes lluvias que afectan a la Comunidad Valenciana, la zona del río Magro, el bajo Júcar y el barranco de la Casella (en la comarca de la Ribera Alta, la más afectada por los efectos del temporal) puede experimentar una acumulación de aguas «importantes» que puede alcanzar hasta los doscientos metros cúbicos por segundo en las próximas horas.
Apertura de compuertas
Mientras, la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) procedió ayer a la apertura parcial de las compuertas del pantano del Regajo, en el término municipal de Jérica (Castellón), para regular la acumulación de agua procedente del río Palancia y la rambla de Gaibiel , según informaron a la agencia Efe fuentes del Ayuntamiento de Segorbe.
Como consecuencia de las lluvias que desde el pasado viernes registra la comarca castellonense del Alto Palancia, que ha llegado a acumular 160 litros por metro cuadrado, el río Palancia ha registrado un caudal inusual y el embalse se encuentra prácticamente al máximo de su capacidad.
De hecho el río se encontraba ayer desbordado a su paso por la localidad de Segorbe (Castellón) y cubría caminos y pasarelas. Las autoridades de la CHJ dieron aviso a los ayuntamientos cuyos términos municipales se encuentran en el cauce fluvial de la crecida del río y de la apertura de las compuertas del embalse, como medida preventiva.