medio ambiente
Más calidad y menos cantidad por el calor y la sequía en una vendimia adelantada
Las escasas lluvias y las elevadas temperaturas han favorecido que las uvas no tengan enfermedades, pero sean más pequeñas
Con la vista puesta en el cielo y en el termómetro más que nunca en cualquier otra época del año están los viticultores y bodegueros de Castilla y León estos días. Cruzan los dedos para que nada se tuerza, pues llega el momento de la verdad, que las uvas mueran en la cepa para renacer en la bodega convertidas en vino. La cuenta atrás para la vendimia ya ha empezado, aunque no será hasta finales de octubre o principios de noviembre cuando acabe de recogerse el preciado y mimado fruto en las doce denominaciones de origen y otras tantas indicaciones geográficas protegidas amparadas con el sello de calidad que hay en la Comunidad. Un territorio tan extenso ( más de 94.000 kilómetros cuadrados ) y con una orografía tan variada que hacen que el inicio de la vendimia y la situación del viñedo cambie mucho de unas zonas a otras. En lo que sí coinciden todos es en que, salvo inclemencias de última hora, la calidad de la uva este año es «muy buena», aunque la cantidad parece algo mermada. Las altas temperaturas del estío y la ausencia de lluvias han favorecido que no haya plagas, pero el fruto también se resiente y la producción no será tan alta.
D.O. Bierzo
La más madrugadora ha sido la DO Bierzo. Donde ya se han cortado algunos racimos de variedades muy especiales y ayer celebraron la primera pisada oficial. Pero será a finales de mes o como mucho al entrar en septiembre cuando las más de 70 bodegas comiencen a recibir las uvas. La vendimia también llega este año «un poco adelantada» pensando en el grueso de actividad. La calidad es «fantástica», con uvas «súper sanas» y con «muy buenas características». El otoño e invierno bastante lluviosos han sido la salvación para esta DO en la que confían en que la cantidad sea similar a la de 2014 y se rocen los 16 millones de kilos.
Rueda
También en Rueda están listos. El 27 ó 28 ya se comenzarán a cortar los primeros racimos, aunque será a comienzos de septiembre cuando «se generalice» una vendimia a la que el «relax» que se ha tomado el termómetro en agosto ha permitido «ralentizar» la maduración. El ciclo de la planta se había adelantado, pero las noches más frescas de este mes y los días más cortos permitirán que la recogida comience «más o menos en las mismas fechas que el año pasado o más retrasadas». Lo cierto es que el tiempo ha sido un aliado para brindar una «calidad muy buena», aunque la cantidad difiere de unas zonas a otras. «Hay parcelas mejor cuajadas», reconocen desde esta DO. Esperan lograr una cifra similar a los más de 98,3 millones de kilos recogidos el año pasado.
Sierra de Salamanca
Y algo antes incluso llegarán los primeros racimos a las seis bodegas de Sierra de Salamanca, una joven DO, que prevé iniciar la vendimia el 24 ó 25, aunque se generalizará a principios de septiembre. El calor y la falta de lluvias hacen que la uva esté «sanísima» y en unas condiciones «excepcionales», aunque también ha supuesto que se prevea una «menor producción» de los 200.000 kilos de 2014.
Ribera y Toro
En denominación más grande, Ribera del Duero, aún es pronto para hacer cálculos de cuándo llegará el ajetreo a la viña. Lo habitual es vendimiar en octubre. «Ligeramente adelantada» parece que llegará la cosecha en Toro. En torno al 20 de septiembre, se estima, y, según las previsiones, con «una pequeña merma» en la cantidad por el calor y la falta de lluvias invernales.
Cigales
«No tan pronto» como en un principio se preveía, pero «sí adelantada» llegará a Cigales, donde calculan que en torno al 10 ó 15 de septiembre comenzarán la recolección, cuando lo habitual es a finales de mes. El envero marcha «bien», aunque hay uvas algo más «pequeñas», ya que están sufriendo la sequía. «Una chaparrada vendría de perlas», aseguran. Con menos peso, pero, eso sí, «muy sanos» están los racimos y ganando en otros componentes. Esperan llegar a los 8,5 ó 9 millones de kilos.
Tierra de León
Sobre el 10 ó 15 de septiembre esperan comenzar con el trasiego en Tierra de León en las zonas más al sur de variedades blancas. Agosto y sus temperaturas más suaves también han sido claves para frenar una cosecha que al arrancar el verano «venía muy adelantada». Sus previsiones se sitúan en lograr los cuatro millones de kilos, «lo normal».
Tierra del Vino de Zamora
Un «poco de agua» reclaman en la DO Tierra del Vino de Zamora, que ayude a que las uvas engorden un poco. En total, sus previsiones se sitúan en lo habitual, unos 900.000 kilos. Lo verán a partir de la segunda quincena, cuando comience una vendimia «adelantada», pues el ciclo vegetativo de la planta va unos diez días por delante de lo normal.
Arribes, Valtiendas y Arlanza
Una añada dentro de lo normal, con aproximadamente un millón de kilos recogidos, esperan en Arribes del Duero, donde aún queda para vendimiar. También a finales de septiembre llegará la época de más trabajo en Valles de Benavente y Valtiendas (Segovia).Para la DO Arlanza, el Pilar es la fecha clave, pero, de seguir así las condiciones se adelantará a finales de septiembre. Con un viñedo con «buena calidad», también sus racimos acusan el excesivo calor y calculan que la recolecta caerá en torno a un 10%.