política
Espantada del candidato del PSOE de Zamora tras apartarle del pacto de IU
José Luis Gómez y su número dos dejan las filas socialistas, serán concejales y apoyarán al candidato de IU
Penúltima batalla en la guerra abierta dentro del Partido Socialista de Zamora. El líder de la candidatura del PSOE al Ayuntamiento de la capital, José Luis Gómez, anunció ayer que no se integrará en el Grupo Municipal Socialista que se debe constituir en la sesión del 13 de junio, sino que pasará a formar parte del grupo de concejales «no adscritos», junto con su número dos en la lista, Mari Cruz Lucas, puesto que ninguno tiene intención de renunciar a sus actas. Además, abandonarán las siglas socialistas.
La guerra socialista se disputa en medio de las negociaciones para alcanzar un pacto con Izquierda Unida que permita la llegada a la Alcaldía del candidato de IU, Francisco Guarido, gracias a la suma de los ocho ediles logrados por esta formación y los cinco socialistas, frente a los diez del PP y los dos de Ciudadanos. Sin embargo, «desde el mismo día de las elecciones» comenzaron las «injerencias» de la Ejecutiva Provincial Socialista en este proceso, tal y como relató ayer Gómez en una convocatoria en una cafetería.
Las discrepancias las ha originado el rechazo de José Luis Gómez a integrarse en el equipo de Gobierno de Francisco Guarido, tal y como le pedía su partido. Y es que el socialista lo que proponía era la máxima colaboración con un programa de izquierdas.
José Luis Gómez relató cómo se han sucedido los acontecimientos desde el día de las elecciones en el que ya el secretario provincial del PSOE, Antonio Plaza, se erige como representante en las negociaciones con IU. Algo que según Gómez «no le corresponde» y que no ha sucedido en Benavente, donde también se encuentran en negociaciones ambos partidos. «En Benavente el candidato ha tenido plena libertad para actuar, en Zamora no está ocurriendo lo mismo», censuró Gómez, quien consideró que con esa actitud la dirección del PSOE les estaba invitando a irse.
Según dijo, se le ha ocultado información sobre este proceso negociador en los días sucesivos, en los que él también ha mantenido alguna reunión «bastante provechosa» con IU. Pero, recriminaron que últimamente han contemplado en el PSOE «las actitudes más ruines y rastreras» que han podido ver en su vida y denunciaron presiones por parte de la dirección provincial socialista para que renunciase a tomar posesión como concejal. Pero no lo harán, apuntó Gómez, primero por «una cuestión de responsabilidad», ya que les han elegido los ciudadanos. También, porque si salen, la siguiente en la lista sería Adoración Martín, esposa del secretario provincial, Antonio Plaza.
Ausentes en el anuncio
Lo que sí dejaron claro Gómez y Lucas, y de forma contundente, es que apoyarán al candidato de IU en su investidura como alcalde de Zamora. «Ya lo hice personalmente y en redes sociales. Va a ser un magnífico alcalde, con un programa de izquierdas que pide Zamora y para ello haré público mi voto y el de Cruz el día de la constitución de la Corporación municipal», afirmó, José Luis Gómez.
Precisamente, éste es el único punto de acuerdo que existe entre el aparato provincial del partido y los nuevos díscolos socialistas. Y es que el jueves, durante una rocambolesca rueda de prensa, el secretario provincial del PSOE, Antonio Plaza, y la secretaria general de la Agrupación Local, Mar Rominguera, ya confirmaron también el apoyo de su grupo al candidato de IU.
Lo extraño de esa comparecencia, en la que se iba a anunciar el apoyo a IU, es que no estaban presentes ni el número uno ni la número dos de la candidatura socialista, es decir, ni José Luis Gómez ni Mari Cruz Lucas, quienes dejarán las filas socialistas. Mientras que sí asistieron los líderes de Izquierda Unida, tanto a nivel local como regional; así como los representantes provinciales del PSOE y su líder regional, Luis Tudanca.
Crisis eterna
Por otra parte, José Luis Gómez se lamentó ayer de la guerra en la que está inmerso su partido en la provincia de Zamora desde hace años y que ha originado una sangrante pérdida de votos. «La historia en este partido se repite, como veis. Comprendo mejor algunas situaciones del pasado», en alusión velada al exportavoz y excandidato a la Alcaldía, Manuel Fuentes, quien dimitió de sus cargos y se dio de baja como militante el pasado mes de febrero, en medio de una aguda crisis interna del PSOE de Zamora y en vísperas de las elecciones.
Una fractura interna que se ha ido cobrando víctimas por el camino, dejando en la cuneta a socialistas que han ocupado importantes cargos dentro del PSOE. Llamativos fueron los casos del que fuera portavoz municipal socialista, Carlos Hernández; la subdelegada del Gobierno, Pilar de la Higuera; la portavoz socialista en la Diputación, Rosa Muñoz; además de un nutrido grupo de alcaldes de pueblos que semanas antes de los comicios también salieron del PSOE. Algunos de ellos incluso formaron un nuevo partido político Decide que no ha obtenido representación en el Ayuntamiento de Zamora, pero sí en algunos consistorios de la provincia, con diez mayorías absolutas y situándose, aunque a distancia, como la tercera fuerza más votada en esta provincia a nivel local tras PP y PSOE.
Desde el PP, su presidente provincia, Fernando Martínez-Maillo, advirtió de que, en caso de que IU pacte con los socialistas, la crisis interna y «eterna» del PSOE «se transformará en una crisis del Ayuntamiento, que pagarán los zamoranos».