noción personal
Cuatro decisiones difíciles
Semana de trajín para los fontaneros de María de Molina, para los neófitos, calle de Valladolid donde se ubica la sede del Partido Popular en Castilla y León. Sin embargo, formalmente las reuniones y documentación parten de allí, pero muchas conversaciones y llamadas se llevan a cabo desde la propia Presidencia de la Junta. Es lo que tiene liderar el principal partido que a su vez gobierna la institución por antonomasia de la Comunidad.
Después del cambio de cartel in extremis en León capital, mucho se ha escrito sobre ello, pero no diremos más que ha sido una decisión en clave regional, jamás por presiones de algún empresario o su medio; las cuatro decisiones difíciles que tiene que tomar, o quizás está tomando ya Juan Vicente Herrera por encima de otras son la de las personas y candidaturas al Ayuntamiento de Valladolid, al Ayuntamiento de Segovia, al Ayuntamiento de Ponferrada y a la Diputación de Soria. Relevar a personas, cambiar de cabezas de lista, escoger entre nombres nuevos… Cada lugar, cada persona, es un caso y unas circunstancias. Y todos sabemos lo mucho que le cuesta tomar decisiones de este cariz al presidente y a su estable entorno. Eso sí, cuando se decide no hay quien ponga la marcha atrás.
En esto de los cabezas de lista se podría escribir un tratado ligado a la propia idiosincrasia del partido específico, del municipio concreto y hasta de la personalidad de los que han sido mucho tiempo alcaldes o de los que pretenden serlo. Incluso del periodista que se cree analista y del que lo es en realidad. Existen varias leyes o códigos no escritos, que tan solo la inteligencia o la experiencia enseña. El ego de las personas es infinitamente más grande de lo que uno puede llegar a imaginar. La rumorología mal intencionada es infinita. Las peores traiciones son las de los más allegados…Y así hasta llegar a la fundamental: saber ser siempre un aprendiz.