sanidad
La gripe inicia la fase de descenso al caer a 297 casos por cada 100.000 habitantes
La actividad gripal se sitúa ya en una intensidad media, manteniéndose como predominantes los virus A y B

La tasa de incidencia de la gripe en Castilla y León ha descendido de forma notable entre el 2 y el 8 de febrero, iniciando una nueva etapa, tras alcanzar los 434 casos por cada 100.000 habitantes la pasada semana. La menor actividad de los virus ha permitido situar la tasa en 297 casos, lo que supone una intensidad media, similar a la del resto de España y Europa, según los últimos datos recogidos por la Red Centinela Sanitaria.
Asimismo, la gripe se mantiene todavía muy por encima del umbral epidémico, fijado en los 50 casos por cada 100.000 habitantes, una barrera que rebasó a principios de año. La Consejería de Sanidad había anunciado este martes que alcanzaría esta semana su nivel máximo para iniciar posteriormente su descenso. «No hemos llegado al máximo de hace algunos años», dijo su titular, Antonio María Sáez Aguado, durante una visita al nuevo edificio del Hospital Provincial de Zamora.
En ese sentido, el virus mayoritario, el tipo A, subtipo H3, y el B. Por grupos de edad, la mayoría de los casos afectaron a niños y adolescentes hasta los 14 años. La semana pasada, 31 médicos de la Red Centinela Sanitaria comunicaron 102 casos de gripe, por lo que la población cubierta con esta estimación asciende a 25.051 personas. Además, se procesaron 138 frotis faríngeos (raspado en la garganta para extraer una muestra y analizarla), de los que se detectaron 70 casos.
Respecto a los 637 casos acumulados, 595 fueron de personas no vacunadas y los 42 restantes de vacunados, todos ellos ciudadanos de más de 25 años, salvo nueve niños menores de 15 años. Por tramos de edad, el grupo más afectado fue el de los niños de entre cero y 14 años, con 418 casos registrados. A continuación se situaron los adultos de entre 15 y 44 años, con 115. Por su parte, entre las personas de entre 45 y 64 años hubo 96 enfermos; entre 65 y 74 años, 27, y finalmente, entre los ciudadanos mayores de 75 años, ocho.
La Junta de Castilla y León ha admitido en estas semanas una «mayor presión» en las urgencias de la Comunidad debido a los picos epidemicos de gripe, pero ha rechazado que se haya producido un colapso, como se recogió en el informe conjunto de la Defensora Nacional del Pueblo y de sus homólogos en las comunidades autónomas. Para ello, se abrieron 400 camas y se ha ampliado la plantilla en más de 200 sanitarios.