justicia
Tino Pérez pide perdón y acepta los nueve años de prisión por el caso «Ponsferrata»
El juicio por estafa de la constructora se cierra con catorce años y medio de cárcel para los implicados, y la obligación de devolver 450.000 euros
La Audiencia Provincial de León cerró ayer el caso de la estafa inmobiliaria de la constructora «Ponsferrata» con penas de conformidad para los acusados. Suman catorce años y medio de cárcel para los implicados, además de la obligación de devolver 450.000 euros a las 21 familias que adelantaron su dinero para comprar unos pisos que nunca se llegaron a construir, en el barrio de Flores del Sil, en Ponferrada (León).
Diez años después, la Justicia impone una condena de nueve años de cárcel al principal implicado y dueño de la empresa, Tino Pérez, por delitos de apropiación indebida, estafa e insolvencia punible. Se le descontarán dos años que ya pasó en prisión preventiva, tras su detención en el aeropuerto de Barajas, donde fue arrestado en 2008 después de haber permanecido huído en países de Sudamérica. En los dos últimos años, ha disfrutado de libertad. Ayer, durante su comparecencia en la Audiencia Provincial, donde se debería haber celebrado el juicio, Tino Pérez pidió perdón a los afectados, se mostró arrepentido y asumió la obligación de «reparar el mal hecho», antes de aceptar esa pena. Además, hay condena de cuatro años y medio de cárcel para su esposa y un año para su hija, quien no tendrá que ingresar en prisión. Las dos, visiblemente afectadas, lloraron en la vista oral.
La emoción se trasladó, también, a las familias que se vieron afectadas por este caso, que ven cómo empieza a «cicatrizar una herida muy honda», según manifestó su abogado, Marco Morala. Esas familias estafadas recuperarán cantidades que oscilan entre tres mil euros, que pagaron dos parejas, y los 68.000 euros, que llegó a entregar otro comprador.