política
El PSOE se enreda en las Cortes
Calificativos de «pringao y tonto», la petición de un protocolo que ya existe y un texto plagiado dibujan el pleno de ayer de los socialistas
En la segunda sesión del pleno de las Cortes regionales celebrada ayer, la encuesta del CIS sobre la intención de voto fue un runrún durante toda la mañana. El desplazamiento al tercer puesto del PSOE, tras el empujón de Podemos, no dejó indiferente a nadie y fue utilizado desde las filas del PP.
Lo cierto es que la bancada socialista protagonizó unos debates parlamentarios de los que no salió demasiado airoso, tanto por el fondo como por las formas, a lo que hay que sumar la evidente falta de cohesión del grupo. La intensidad llegó a partir del cuarto punto del orden del día con una Proposición No de Ley, presentada por el PSOE, que instaba a la Junta a exigir al Gobierno una compensación económica por los intereses pagados por la deuda emitida desde el año 2012. Fue el procurador socialista José Francisco Martín el encargado de defender la iniciativa y, para ello, tachó al Ejecutivo regional de «tonto, atontado, sumiso y K.O.», entre otras lindezas, además de calificarlo de «pringao» o decir que el presidente Herrera «se vino con el rabo entre las piernas» tras su reunión con el ministro Montoro.
Unas descalificaciones a las que añadió que «a la vista de lo que ha pasado además de por tontos les toman por la Comunidad más ridícula», por la posición que ha mantenido la Junta en torno al FLA y al nuevo Fondo de Facilidad Financiera y que ha llevado a pagar unos intereses a Castilla y León que a otras comunidades les han sido condonados. «¡Hace falta ser pringao y tonto!», repitió el procurador socialista, lo que llevó a la presidenta de las Cortes, Josefa García Cirac, a llamarle al orden.
Con la siguiente Proposición No de Ley las formas se suavizaron notablemente ya que fue defendida por la procuradora socialista Ángela Marqués para instar a la Junta a que negocie con las eléctricas el suministro para las personas que se encuentren en situación de pobreza energética. Sin embargo, en este punto, Marqués tiró por elevación y llegó a señalar que en España se estaban produciendo «muertes prematuras» de enfermos crónicos y ancianos que no pueden hacer frente a los gastos de luz y calefacción.
La portavoz del Grupo Socialista, Ana Redondo, fue la encargada de defender después la siguiente iniciativa de su equipo por la que se instaba a la Junta a establecer un sistema de interlocución inmediata con las empresas en crisis de la Comunidad. La respuesta llegó con el portavoz del Grupo Popular, Carlos Fernández Carriedo, quien recordó a su señoría que en febrero de 2012 se firmó con patronal, sindicatos y entidades locales un protocolo de actuación para empresas en crisis, y, de hecho, mostró en el hemiciclo una guía publicada por CCOO. «Si en su grupo trabajasen y se hablasen las encuestas no serían las que son», dijo en referencia al CIS. Redondo zanjó el debate reclamando para empresas como Everest el mismo trato que la Junta ha tenido con Campofrío.
Tampoco tuvieron suerte los socialistas con el Debate de Totalidad del Proyecto de Ley de Transparencia y Participación Ciudadana, para el que, por primera vez en esta legislatura, presentaron un texto alternativo que fue defendido por María Fernanda Blanco y desmontado por el viceportavoz del Grupo Popular, Juan José Sanz Vitorio al asegurar que de los 73 artículos del texto, 53 estaban copiados de la ley andaluza, 12 de la navarra, 13 son una mezcla de leyes y sólo siete son de creación propia. «Una mala copia», según Sanz Vitorio, ya que, según dijo, las propuestas del texto alternativo no están recogidas en las enmiendas parciales del Grupo Socialista. Además, su irónica insistencia en explicarse así mismo por qué su «buen amigo» Francisco Ramos, eludió «el marrón» y no defendido el texto socialista, le obligaron a retirar dichas alusiones -mientras arreciaban las quejas del PSOE-, para evitar que el palentino pidiera la palabra.