Valdeón dice que le gustaría volver a la Junta, pero «depende del equipo»

En ninguna de las ediciones anteriores -y ya son siete- se había conseguido tanto poder de convocatoria como el que logró ayer la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, que recogió el Premio al Personaje Público que Mejor Comunica que cada año concede la Universidad Europea Miguel de Cervantes, previa elección de los responsables de los medios de comunicación de la Comunidad. Ni siquiera el admirado seleccionador Nacional, Vicente del Bosque, consiguió hace dos años que coincidieran bajo el mismo techo, como ocurrió ayer, en el salón de actos de la universidad vallisoletana, cuatro consejeros -Cultura, Educación, Sanidad y Familia-, la presidenta de las Cortes, el delegado del Gobierno, el alcalde de Valladolid, el portavoz del PP en el Parlamento regional, diputados, senadores... En definitiva, todo un elenco de políticos locales y regionales que, al margen de la simpatía que la alcaldesa de Zamora despierta, parecían responder al «runrún» de que Rosa Valdeón está llamada a desempeñar altas responsabilidades en el próximo gobierno regional del PP, tras las elecciones autonómicas del mes de mayo. Y para ir abriendo boca y haciendo gala del premio concedido por su buen hacer como comunicadora, la alcaldesa de Zamora (que ya hace meses anunció su intención de no volver a ser candidata a la Alcaldía), no eludió la pregunta de si le gustaría volver a la política regional y respondió con un contundente «no me importaría», aunque seguido de matices.

Así, Valdeón, que ha dicho en más de una ocasión que no necesita la política para vivir porque tiene su profesión (es médico), sí reconoció que «le apasiona», entre otras cosas porque su actividad «siempre ha estado ligada al servicio público», pero al mismo tiempo explicó que para una hipotética vuelta tendría que tener muy en cuenta tanto el equipo del que formaría parte, como el proyecto.

«Aquí pesa más que lo personal el conjunto», aseguró, y matizó que «uno va a un trabajo cuando le gusta el trabajo que le ofrecen, pero también cuando le gusta el equipo, las circunstancias, cuando lo que va a hacer cree que lo puede hacer bien». En este sentido y por si había alguna duda, recordó la legislatura en la que fue consejera de Familia con el Gobierno de Herrera «una etapa de lo más gratificante». Por eso, reconoció que «en esas mismas condiciones nadie diría que no, pero la cuestión personal nunca es la decisoria, sino el equipo y el proyecto».

En definitiva, que la alcaldesa de Zamora, una vez que insistió en que «no quiero continuar en un proyecto que yo entiendo que ha acabado para mí con ocho años en la Alcaldía», dejó claro que «si en política tengo algún papel que alguien en mi partido cree que puedo hacer, no voy a echarme para atrás, porque es una actividad muy gratificante».

Y como buena comunicadora, un papel que puede estar llamada a seguir desempeñando, la alcaldesa de Zamora se refirió al fenómeno «Podemos» para asegurar que «la imagen de su líder ha roto los esquemas y eso es algo para que todos hagamos autocrítica». «No se puede pensar que alguien puede descubrir el mundo, cuando hay quien lleva mucho tiempo en política; por lo tanto, lo que tenemos que hacer todos es aprender a comunicar».

También explicó que «hay que comunicar bien, pero comunicando lo que crees y de lo que estás convencido» e, incluso, «criticar con respecto y moderación». A su juicio, los militantes de una formación política tienen su «parte personal» , de forma que «en líneas generales tenemos que estar de acuerdo con el partido pero puede haber matices y tenemos que decirlo».