medio ambiente
«Buscando a Nemo» en las obras de la Autovía Ruta de la Plata en Zamora
Rescatan 1.300 ejemplares de carpa, carpín, barbo, tenca y anguila aislados en una de las colas del pantano a consecuencia de las obras
El Servicio Territorial de Medio Ambiente de Zamora trasladó más de una tonelada de peces al embalse de Ricobayo que quedaron aisladas en una de las colas del pantano a consecuencia de las obras del último tramo en construcción de la autovía Ruta de la Plata, A-66. «La construcción de las estructuras necesarias para los puentes de la autovía Zamora-Benavente aislaron durante los últimos meses una de las colas del embalse, concretamente, la que llega hasta San Cebrián de Castro, por lo que una importante cantidad de ejemplares de varias especies piscícolas han necesitado ser recuperadas», indicaron fuentes de la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León.
«Una vez finalizadas las obras de construcción de los viaductos, la eliminación de la ataguía suponía el desembalse de todo el volumen de agua almacenado, lo que podía poner en peligro la supervivencia de la fauna al quedarse aislada en pequeñas pozas», explicaron. El movimiento de tierras y el resto de maniobras comenzaron el 20 de noviembre pero no fue hasta finales del mes pasado cuando comenzó el proceso de pesca eléctrica, «todavía con bastante agua almacenada y en duras condiciones de acceso».
El trabajo del personal de campo del Servicio Territorial de Medio Ambiente fue arduo debido a que se actuó en una zona con movilidad complicada. Por ello, los efectivos de la brigada de caza y pesca de Benavente trabajaron durante toda una jornada y recibieron la ayuda de la brigada de Ferreras al día siguiente para completar el traslado de los peces que permanecían aislados.
Unos 1.300 ejemplares
Finalmente, fueron trasladadas más de 500 carpas, 400 carpines, 350 barbos, dos tencas e incluso una anguila de las que la Administración autonómica proporcionó al embalse en los años 2001, 2002 y 2003. También se extrajeron 60 ejemplares de lucio que, cumpliendo con la normativa sobre especies invasoras, no fueron devueltos a las aguas del embalse. En estas labores participaron dos agentes medioambientales, un celador de Medio Ambiente y personal de campo de apoyo, hasta un total de siete personas, con tres vehículos, una barca y un equipo de pesca eléctrica, como indicaron las mismas fuentes.