fútbol
Los chavales se doctoran en la Copa
Los pucelanos consiguieron el pase tras ganar al Girona en un partido en el que participaron cinco jugadores del filial
Muchos de los aficionados que llegaron a Zorrilla para presenciar el partido de Copa del Real Valladolid con el Girona, tuvieron que frotarse los ojos al ver la alineación titular. Porque aunque había siete jugadores del filial convocados ni en el mejor de sus sueños podían imaginar que su entrenador, Joan Francesc Ferrer «Rubi» colocaría a cuatro en el equipo inicial. Y menos que serían tres de ellos los que tendrían la una gran parte de la responsabilidad ofensiva desde sus posiciones de medio izquierdo, media punta y delantero -Rubén Vega, Jorge Hernández y Guille Andrés-. A ellos se unía Carmona desde el lateral derecho y había ganas de ver de lo que eran capaces de hacer en el terreno de juego.
Y muy pronto se palpó que no iban a desentonar. Que ni la presión o los nervios del debut les iban a pasar factura y que su desparpajo era el imprescindible para un chaval que debuta y quiere convencer al entrenador que puede estar tranquilo si tiene que contar más veces con él.
El Valladolid salió con ganar de seguir vivo en la competición copera y fruto de ello las ocasiones llegaron. Sobre todo con continuas rupturas por banda en las que tanto los laterales como Omar Ramos y Dani Vega se convirtieron en protagonistas. A ellos se sumó el trabajo de Guille Andrés en punta de vanguardia. Su continua brega, bien secundada por Jorge, hizo que los pucelanos robaran muchos balones cerca de la portería catalana y que el peligro rondara una y otra vez su área.
No con ocasiones claras de gol, pero sin con un continuo runrún que hacia albergar esperanzas de que los castellanos llegaran al descanso con ventaja en el marcador. Una circunstancia que no se dio pero que, al menos, agradó al público que se acercó a Zorrilla.
Después del descanso el partido siguió por los mismos derroteros. El Valladolid dominaba con claridad, mientras que el Girona parecía que se conformaba con que pasaran los minutos. Hasta que en un saque de esquina, bien centrado por Omar, permitió que Guille Andrés, después de una gran jugada de desmarque, se quedara solo en el área pequeña y rematara de cabeza el 1-0. Un tanto que hacía justicia a lo visto en el terreno de juego y que, además, premiaba el esfuerzo de uno de los debutantes.
Con el gol el Valladolid se sintió aún más cómodo y los visitantes bajaron un poco más los brazos. Tanto como su portero en el segundo gol cuando, en otro saque de esquina botado por Omar, pifió en su salida y permitió que Samuel remachara el 2-0.
Con dos tantos de ventaja el partido cayó en el sopor y solo un par que arranques de orgullo de los gerundenses con dos llegadas peligrosas a las que respondió perfectamente Dani Hernández, y la salida al campo de otro jugador del filial, Anuar, dieron algo de salsa al final del duelo.