punto de vista
Un cambio decisivo
Luis Tudanca será el sábado aclamado secretario autonómico del PSOE de Castilla y León en un congreso extraordinario que tiene que servir para cerrar heridas que todavía están abiertas. El PSOE ha vivido un tiempo de tregua para la celebración de las primarias que han llevado a Luis Tudanca al frente del partido, pero a partir del sábado llega el día a día y tiene ante si el reto de coser una organización dividida y enfrentada en no pocos casos.
El nuevo secretario trabaja en silencio y de forma muy reservada, un rasgo de su carácter muy acusado, para confeccionar la nueva ejecutiva que presentará al Congreso y que pretende que sea la expresión del diálogo que está manteniendo estos días con los distintos sectores del partido. Sobre la mesa está la idea del liderazgo, de la integración, del trabajo en equipo, de la búsqueda del objetivo común y de hacer desaparecer cualquier atisbo de la pasada bicefalia. El partido tiene que salir de todo este proceso vacunado de las bicefalias que tan mal resultado le han dado a lo largo de su historia en Castilla y León.
Con Óscar López fuera de la escena regional, con un Julio Villarrubia comprometido en dar un paso atrás y con la mayor legitimación jamás lograda por un líder regional socialista, Luis Tudanca tiene que sentirse con las manos libres para coger el timón socialista e intentar integrar a todas las provincias. No tiene mucho tiempo para florituras, porque el calendario es endiablado y el horizonte electoral está tan próximo, que antes de que pueda darse cuenta las próximas primarias estarán convocadas y tendrá ante si unas elecciones claves para el partido en la comunidad.