Gesplan contra la propiedad privada

A la luz de la polémica surgida en torno al PGO de San Bartolomé de Tirajana, el problema es, una vez más, la existencia de leyes —como la turística— o planes urbanísticos —como el PGO— que no respetan la propiedad privada . La nueva ley turística obliga a que los propietarios no puedan gestionar sus propios inmuebles y el PGO a destinar dichos inmuebles al uso que quiere el planificador urbano y no el que demanda la sociedad a través del mercado.

Rafael Castellano , gerente de Gesplan, entrevistado por «La Provincia», habló en nombre del ejecutivo regional, según el diario, y precisó que «los propietarios podrán seguir haciendo uso de los complejos turísticos en las actuales condiciones y no deben preocuparse por la nueva normativa». Además, indicó que la alarma «no está fundamentada ni tiene ningún sentido».

Es inaudito que el gerente de una empresa pública ineficiente, endeudada y que ejerce una competencia desleal hable en nombre del Gobierno de Canarias. Este hecho demuestra al grado de perversión que ha llegado un sistema que no respeta los derechos de propiedad.

La alarma creciente está muy fundamentada, pues en el caso que usted viva en un antiguo complejo turístico que ha dejado de serlo o quiera alquilar su apartamento como vivienda para turistas o residentes y el plan general haya decidido hacer caso omiso a la realidad física de su edificio o urbanización y se empeñe en clasificar el suelo como uso exclusivamente turístico usted no podrá hacer ni lo uno ni lo otro.

La razón nos la da el señor Castellano al declarar que por culpa de usted, al haber decidido explotar por su cuenta su propiedad o haber decidido irse a vivir a la misma o alquilarla para dicho fin a un tercero, Gran Canaria ha perdido «miles de camas».

El culpable no es Gesplan que realiza planes hiper-intervencionistas que impiden que se puedan regenerar nuestras zonas turísticas ni el Gobierno de Canarias que aprueba leyes como la turística que atentan contra el derecho a la propiedad privada al prohibirnos explotar nuestras propiedades como queramos o impide que se puedan hacer nuevos hoteles de cuatro estrellas.

No, el señor Castellano lo tiene claro, el culpable es usted, pues un día vio que lo mejor para sus intereses era hacer algo distinto a lo que planificadores como él quieren imponerle. Por ello, nos indica que todo esto «es lo que hay que regularizar» aún más.

Si de verdad queremos mejorar nuestras zonas turísticas debemos dejar paso a la creatividad empresarial que viene de la mano del respeto a la propiedad privada. Para conseguir algo así el Gobierno de Canarias tiene que derogar la monstruosa ley turística y cerrar de forma inmediata Gesplan. De lo contrario, seguiremos en manos de los caprichos de estos planificadores incapaces e ineficientes.