Sara Baras taconea el alma llena de «voces»
Con unas manos que mueven versos a cada giro, que uno imagina infinitas en sus caricias, colmadas de sensualidad
![Sara Baras taconea el alma llena de «voces»](https://s3.abcstatics.com/Media/201507/10/sara-baras-cante--478x270.jpg)
Sara Baras taconea el alma hasta poseerla. Masculina y femenina a la vez. Hay un sutil hilo invisible que te lleva hasta las ‘Voces’ de Sara Baras y te adentra en su universo flamenco , el de los grandes, y ese hilo de Ariadna no es otro que el del amor. El del profundo amor que Sara le tiene a este arte y a quienes serán para siempre sus maestros, pues esta gaditana de tacón y raza sabe bien que no hay mayor corazón que el que encarna la gratitud.
‘Voces’ es un trabajo escénico potente y vitalista, dirigido por la propia Sara Baras, que hace un recorrido por diferentes palos del flamenco recordando a los grandes maestros. El éxito en el Cuyás fue un clamor, arrancando cada dos por tres (casi al compás), los aplausos de un público entregado que llenó el aforo, y que casi podría decirse que se negaba a marcharse.
Paco de Lucía, Camarón de la Isla, Antonio Gades, Enrique Morente, Moraíto y Carmen Amaya son algunas de esas ‘Voces’ que inspiran a la bailaora, que se escuchan en off, escalonadamente, dando paso unas a otras, en el recuerdo pero con el cante y con el toque . Guitarras y cajones flamencos. Pero, sobre todo, se bailan en vivo y desde adentro, de muy adentro y muy ‘sentío’.
Sara Baras está inmensa, coquetea como sólo ella sabe con sus raíces, desde la ternura al tiempo que con la garra. Suave e intensa a la vez, como aroma de azahar que te tienta y te prende al primer soplo . Con unas manos que mueven versos a cada giro, que uno imagina infinitas en sus caricias, colmadas de sensualidad.
Y del dolor y la tristeza por los que ya no están sobre un escenario, nace el mayor romance , que se viste de fiesta en el vuelo de Sara. De lunares se ciñe primero el luto, para luego darle aire al biés de su vestido. Y color. Mantones con los que torear la vida que toca, rinde homenaje a quienes la amamantaron con flamenco y la inspiran en su baile, en cada paso.
‘Voces’ es un espectáculo tradicional en el que los sentimientos hablan a través del arte. Un cuerpo de baile de cinco personas, que cuenta también con el bailaor José Serrano (su amor), como artista invitado, la acompañan junto al cuadro musical. El cante y el toque brillan solos, con identidad propia , sin limitarse a ser mero acompañamiento. Sabe a sangre en cada estrofa y la pasión te ahoga al poseerte. El alma ya fue prendida hace rato.
Y para el final de esta ‘suite flamenca’ reserva el verde, el de la fiesta… ‘Verde, que te quiero, verde’. Verde de Andalucía y verde que fue color de Al Andalus. ‘Verde, como el trigo verde’. Como la hoja del limonero y de la simiente que queda por madurar, y de todo cuanto queda aún por pasar. Porque como decía Enrique Morente, “En el cante flamenco no hay maestros. Los hay en el baile flamenco y en la guitarra. En el cante hay discípulos”. ¡Olé, maestra!