boberías económicas
La fatal arrogancia del PSC
Es perentorio que se elimine la Ley Turística, la moratoria y se liberalice el suelo turísticopara dejar paso a la empresarialidad, la innovación y la mejora de nuestra oferta de alojamiento
El Partido Socialista Canario (PSC-PSOE) ha pretendido imponer el número de empleados que deben tener los hoteles del archipiélago. A instancias de la diputada socialista Gloria Gutiérrez presentó una Proposición no de ley (PNL) en la que pretendía que se establecieran “unas plantillas mínimas en los diferentes departamentos que aseguren que el servicio a los clientes se ajuste a la calidad del establecimiento, y con ello las condiciones de trabajo del personal no supongan ningún riesgo para su salud laboral”.
Sorprendentemente, dado que este Gobierno de Canarias ha sido el más liberticida de la democracia, el Parlamento de Canarias aprobó hace unos días la modificación de la Ley de Renovación y Modernización Turística, pero sin incluir esta propuesta.
Es por todos bien conocido que un empresario cuando quiere ganar más dinero lo que tiene que hacer es poner los menos afectivos posibles y bajar la calidad de las servicios al máximo. Esto es más claro aún en el sector turístico. Los hoteles que tengan un personal insuficiente, poco cualificado y que además den unos malas prestaciones en relación a la supuesta calidad del establecimiento son los que triunfan en el mercado. ¿Por qué? Porque los tour-operadores están conchabados con los hoteleros y engañan a los turistas llevándoles a este tipo de hospedajes. Sólo así se garantizan el éxito, el aumento de turistas demandando sus ofertas y el engrosamiento de sus beneficios. Por todas estas razones, necesitamos a nobles políticos como la señora Gutiérrez y sus compañeros del PSC que como expertos del ámbito turístico que son y con muchos años de experiencia en el sector digan a esos empresarios del ramo de qué tamaño tienen que ser las plantillas de los hoteles para que además no se ponga en peligro la salud laboral de los trabajadores.
Este tipo de ocurrencias legislativas definitivamente muestran la fatal arrogancia de nuestros políticos, como diría el premio Nobel de Economía Friedrich A. Hayek. Es sorprendente que políticos que en la gran mayoría de los casos no tienen ninguna experiencia en el sector pretendan decirle a los que sí la poseen cómo deben realizar su trabajo para que las cosas vayan mejor. Es más, estos mismos que pretenden imponer su criterio son los mismos que nos están arruinando día a día a base de endeudarnos con un auténtico derroche del dinero que ellos gestionan, que no es otro que el que sacan de nuestros bolsillos a base de impuestos.
Si de verdad queremos que nuestra oferta turística mejore debemos quitar las trabas a quien intenta competir en el mercado para satisfacer mejor a los turistas. Es perentorio que se elimine la Ley de Renovación y Modernización Turística, la moratoria y se liberalice el suelo turístico para así dejar paso a la empresarialidad, la innovación y la mejora de nuestra oferta de alojamiento. Sólo así podremos satisfacer a una demanda turística cada vez más exigente.