¡Que suba nuestra libertad!

La candidata elegida por la militancia socialista a presidir Canarias en las próximas elecciones, Patricia Hernández, ha sido muy criticada por no haber sabido responder en una entrevista hace unos meses cuál era el PIB de Canarias. La política, lejos de intentar ocultar el supuesto error puntual que seguro que hizo que muchos de nuestros políticos consultaran la Wikipedia, se lo ha tomado con deportividad y humor.

Prueba de ello es que hace unos días en un mitin de su partido sacó el asunto con la mayor gracia posible. Ante los suyos afirmó que del PIB poco le gusta hablar, ante la carcajada del auditorio, y luego declaró que observa en las gráficas económicas que hay «una línea que sube, que sube, que sube… (en referencia al PIB) y otra línea que baja, que baja, que baja…(en relación a la renta per cápita de Canarias)». Posteriormente, afirmó que «la que baja, que baja, que baja» es la que a ella le interesa «que suba, que suba, que suba».

Pues bien, en vez de reconocer que la señora Hernández se ha tomado con salero el no saber responder a la cifra del PIB y preguntar qué es lo que propone para que esa línea suba, ha faltado tiempo para volver a caricaturizar a la única candidata no imputada y elegida en listas abiertas que existe hoy en Canarias. Pues recordemos que el Partido Popular sigue sin candidato y aparentemente no va a ser elegido por sus bases y Coalición Canaria tiene un candidato imputado por acciones nada loables.

No obstante, si la candidata socialista quiere «que suba, que suba, que suba» la renta per capita en nuestras islas debe, entre otras cosas, eliminar la hiper regulación que existe para que las personas puedan cooperar creando riqueza unos con otros y salgan adelante los innumerables proyectos empresariales que están paralizados; tiene que eliminar la moratoria y la actual ley turística que impide que nuestra principal actividad económica pueda adaptarse a las exigencias de nuestros visitantes; es prioritario que baje todos los impuestos a los ciudadanos y empresas reformando el REF para que venga la inversión y el talento a nuestra tierra; y es imperante que cierre todas las empresas públicas ineficientes que tenemos, empezando por la televisión pública, que tanto están costando a los ciudadanos.

Señora Hernández, estás ideas no son de izquierda, pero dado que subir brutalmente los impuestos, como han hecho CC y PP, tampoco era de derechas, igual tiene a bien incluir en su programa ideas que le sirvan para lograr su loable objetivo.