El trasvase del Ebro vuelve a enfrentar a los barones del PP

Desde hace prácticamente diez años, el PP se apartó de la polémica del trasvase del Ebro ignorándolo. El proyecto impulsado por el Gobierno de Aznar provocó un hondo desgaste a los populares aragoneses. La obra quedó aparcada por el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero nada más llegar éste a La Moncloa, en 2004, y el PP optó pocos años después por olvidarse de ese controvertido proyecto.

Sin embargo, sigue generando discusión y, con esta campaña de las elecciones autonómicas, el trasvase del Ebro ha vuelto a generar tensiones entre los barones del PP aragonés y levantino. El candidato popular a la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, ha dado por seguro que su partido aprobará «un nuevo Plan Hidrológico Nacional que apueste por el trasvase del Ebro y el del Tajo-Segura». Lo ha dicho durante la campaña.

La respuesta de la presidenta de Aragón y candidata a la reelección por el PP, Luisa Fernanda Rudi, no se ha hecho esperar, censurando esas afirmaciones de su compañero de partido e instándole a que tanto él como los dirigentes del PP murciano «se lean» el programa marco del partido a nivel nacional, que –según ha destacado Rudi– no ampara el trasvase. Y ha recordado que ese texto «viene figurando en todos los programas del PP desde 2008».

Rudi apela al criterio de la dirección nacional para que este controvertido asunto quede fuera de la arena electoral del PP y no sea utilizado por sus cmopañeros de la Comunidad Valenciana y de Murcia.