Cazado a 183 kilómetros por hora en una carretera en la que no se puede pasar de 90

Un conductor de 60 años ha sido imputado por un delito contra la seguridad vial tras ser cazado por el radar de la Guardia Civil de Tráfico circulando con su coche a 183 kilómetros por hora en una carretera en la que el límite genérico de velocidad es de 90.

Según han informado este jueves fuentes de la Guardia Civil, los hechos se produjeron el pasado día 8. El vehículo fue detectado por una patrulla de Tráfico dotada de radar estático, que se encontraba en la N-230 (Lérida-Francia por Viella), a la altura del término municipal oscense de Sopeira (zona de Barbastro).

Tal era la velocidad que los agentes no pudieron darle el alto, así que procedieron a indagar quién iba al volante a partir de la fotografía de la matrícula del vehículo. Las pesquisas les condujeron a un vecino de Lérida, de 60 años, J.M.P.D., que fue localizado el pasado martes y que reconoció los hechos ante los agentes, según ha informado la Benemérita.

La Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Huesca ha instruido las diligencias por este caso, que han sido entregadas en el Juzgado de Instrucción número 1 de Barbastro.