El millón de euros más amargo

Tiene 20 años y está en coma desde el 4 de julio del año pasado tras ser arrollado por un turismo cuando iba en moto a repartir una pizza, trabajo al que se dedicaba. Necesita atenciones permanentes y el gravísimo traumatismo craneoencefálico que sufrió le mantienen inerte, postrado en la cama.

Tras el juicio, se ha reconocido la culpabilidad del conductor del turismo por haberse saltado un ceda el paso. Pero la indemnización ha quedado dramáticamente abierta, dependiendo de cuándo muera el joven.

El fallo del juzgado de Primera Instancia número 7 de Zaragoza, desvelado por el diario regional Heraldo, establece que si el joven aguanta con vida hasta el 2 de enero de 2016, su familia percibirá una indemnización de unos 100.000 euros; si fallece a partir del 2 de enero de 2016, la cuantía superará el millón de euros.

La legislación establece una serie de baremos por incapacidad en este tipo de casos, mayor si se prolonga la vida al ser mayores los gastos ocasionados por el cuidado de la víctima.

La fecha del 2 de enero de 2016 ha sido fijada por el juez en consonancia con lo indicado por los informes médicos aportados durante el juicio. En ellos se establece que, en lesiones cerebrales de este tipo, se entiende probado que el lesionado solo puede evolucionar hacia una cierta mejoría –por poca que sea– dentro de los primeros 18 meses desde que sufrió el accidente. Pasado ese plazo, las posibilidades de regeneración cerebral se dan por imposibles.

Además, el pronóstico, en la situación de este joven, es muy delicado, dado el riesgo de que aparezcan complicaciones que puedan acabar con su vida.